Samsung presenta sus nuevos smartphones Galaxy S9 y S9+

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Samsung ha presentado oficialmente los Samsung Galaxy S9 y S9+, los dos nuevos buques insignia con los que pretende mantener su liderazgo en Android.

Estamos ante dos dispositivos que mantienen las mismas líneas de diseño que en la generación anterior, aunque mejorando algunos aspectos como el fotográfico.

De hecho, las nuevas cámaras de apertura variable son una de las principales bazas de un móvil que también da los primeros pasos en la realidad aumentada y recibe por fin unos altavoces estéreo.

Como puede ver, los nuevos dispositivos de Samsung vienen equipados con pantallas Super AMOLED de 5,8 y 6,2 pulgadas, en ambos casos con una proporción de 18,5:9 y resoluciones QHD+.

En ellas, el Galaxy S9 ofrece una densidad de 529 ppi, mientras que su hermano mayor sube la apuesta a las 570 ppi.

Todo con una pantalla que, cuando está apagada, da la sensación de no tener marcos por completo y de cubrir todo el frontal.

En su interior late un procesador Samsung Exynos 9810 de 10 nm y ocho núcleos a 64 bits, que viene acompañado de 4 gigas de memoria RAM en el S9 y 6 GB en el S9+.

En cuanto al almacenamiento interno, ambos dispositivos tendrán configuraciones de 64, 128 y 256 GB, incluyendo una ranura microSD con la que poder añadirles hasta otros 400 GB extra.

La principal diferencia entre ambos dispositivos está, además de en su tamaño, en sus cámaras fotográficas.

Quienes quieran un Galaxy S9 tendrán que “conformarse” con una única cámara trasera de 12 megapixeles y apertura variable f/1.5-2.4, mientras que en el Galaxy S9+ habrá una segunda cámara teleobjetivo de 12 megapixeles y sensor AF f2,4.

En cuanto a su cámara frontal, ambos cuentan con un sensor de 8 megapixeles f/1.7.

Otra de las diferencias está en las baterías, con configuraciones de 3.000 y 3.500 mAh para el Galaxy S9 y S9+ respectivamente.

Pero más allá de eso, en ambos móviles nos encontramos con características como el lector de huellas trasero, un Intelligent Scan compuesto de lector de iris y reconocimiento facial, y la suite de seguridad Samsung Knox 3.1.

Los móviles también comparten extras como los nuevos AR Emojis, Bixby Vision y el sistema de convergencia Samsung DeX.

También tienen resistencia al agua IP 68 y altavoces estéreo calibrados por AKG, con ranura minijack de 3,5 milímetros, USB de tipo C y el resto de características habituales en la conectividad como Bluetooth 5.0, LTE, WiFi y NFC.

El Galaxy S9 repite exactamente la misma jugada que el Galaxy S7 con su diseño, la de mantener y perfeccionar las líneas establecidas por la generación anterior.

Esto quiere decir que su aspecto es prácticamente el mismo, con una estructura metálica, una trasera de cristal, bordes curvados y un frontal prácticamente sin marcos.

También mantiene los mismos tamaños de pantalla para ambos dispositivos, con un Galaxy S9 que aprovecha la reducción de marcos para alcanzar las 5,8 pulgadas y un S9+ que sube hasta las 6,2.

En ambos casos contamos con los paneles Super AMOLED que llevan ya utilizando durante unas generaciones, resolución QHD+ y el mismo formato 18,5:9 que vimos en los Galaxy S8.

Uno de los cambios estéticos más esperados y agradecidos es el del lector de huellas.

El año pasado, Samsung decidió ponerlo a uno de los lados de la cámara trasera, haciendo que muchos usuarios se quejasen por tocar y ensuciarla cada vez que querían desbloquear el dispositivo.

Este año Samsung ha aprendido la lección situándolo debajo de la cámara para que haya menos posibilidades de tocar el cristal.

El otro gran cambio está en el sonido.

Parece mentira, pero el Galaxy S9 es el primero de la gama en contar con altavoces estéreo, los cuales estarán calibrados por AKG, e incluyen una tecnología Dolby Atmos con la que nos prometen un sonido envolvente de 360 grados.

Los nuevos Galaxy S9 también incluyen la actualización de procesador a la que ya nos tienen acostumbrados cada año, estrenando el nuevo Exynos 9810 que duplica según los coreanos el rendimiento de cada núcleo con respecto a la generación anterior, e incrementa hasta en un 40% su rendimiento multinúcleo.

También se actualiza el sistema operativo, ya que utilizarán Android 8.0 Oreo.

Este nuevo procesador vendrá acompañado por 4 GB de memoria RAM en el caso del Galaxy S9, con un S9+ que sube hasta los 6 GB de RAM.

En conjunto, entre ambas características deberían ofrecer un rendimiento más que suficiente como para poder mover las aplicaciones y juegos más exigentes del mercado, y para mejorar también el rendimiento en el modo escritorio del Samsung DeX.

Ambos móviles cuentan como principal novedad con una cámara de apertura variable f/1.5-2.4.

Sobre el papel, esta apertura variable permitirá ajustar la cantidad de luz que entra en el sensor dependiendo de las condiciones externas.
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Por ejemplo, la apertura f/2.4 será la utilizada en las escenas diurnas y con mucha luz, mientras que cuando haya baja luz se podrá delegar en una apertura f/1.5.

Según Samsung, el sensor Super Speed Dual Pixel de estas cámaras tienen también un procesador y memoria dedicados, y con los que podrá combinar hasta 12 tomas en una única imagen para producir fotografías de máxima calidad.

En el caso del Galaxy S9 esto es todo, pero el S9+ también incluye un segundo sensor f/2.4 también de 12 megapixeles, con estabilización óptica en ambos sensores, y que permitirá realizar el desenfoque de fondo o efecto bokeh, así como hacer zoom óptico.

En la parte frontal, en ambos casos nos encontraremos con una única cámara de 8 megapíxeles AF y f/1,7.

Si es un amante de la cámara súper lenta, Samsung ha salido al paso de otros fabricantes como Sony permitiéndole grabar videos a 960 fotogramas por segundo.

También incluye una detección automática de movimiento para empezar a grabar justo cuando detecte movimiento en el encuadre.

Y una vez grabado el video a cámara super lenta, el editor de Samsung le permite elegir 35 opciones diferentes de música de fondo o añadir canciones para darle todo el dramatismo que quiera.

Los AR Emojis utilizan un algoritmo para trazar un modelo 3D de nuestro rostro, los cuales podremos utilizar imitando nuestras expresiones, pero también con una serie de stickers preconfigurados con ellas.

Los AR Emoji nos permite crear un avatar personalizado a partir de una fotografía.

Para hacerlo, bastará con activar la cámara frontal, hacernos un selfie y pulsar la función AR Emoji.

El móvil tomará nuestra foto, la tratará y en pocos segundos nos devolverá un avatar al que podremos cambiar el tono de piel, el color o la forma del pelo o la vestimenta.

Cuando esté a nuestro gusto, pulsamos ok y nuestro «emoji» personal estará listo.

A partir de ese momento podremos seguir haciéndonos «selfies», o grabándonos vídeos a nosotros mismos, pero será el «emoji» quien aparezca en pantalla y reproduzca todos los movimientos y expresiones que hagamos frente a la cámara.

Se reconocen, por ahora, hasta 18 expresiones diferentes.

Tanto las fotos como los videos se pueden guardar o compartir al instante.

Una función divertida y destinada a ser muy utilizada, sobretodo si tenemos en cuenta que hoy por hoy se envían en el mundo cerca de 5.000 millones de «emojis» diarios.

La última novedad alimentada por esta cámara está implementada en el propio asistente virtual de Samsung, y se llama Bixby Vision.

Con esta función, el asistente nos traducirá de forma instantánea textos a los que estemos apuntando con la cámara como ya hace Google Translate, y también nos dará información de lugares de interés o nos dirá las calorías de un alimento al que estemos apuntando.

El asistente, por cierto, repite protagonismo con un botón dedicado.

Por último, los nuevos Galaxy S9 y S9+ también implementarán la última versión de la suite de seguridad de Samsung, Knox 3.1.

Con ella tendremos tres opciones de autenticación biométrica, el escáner de iris, las huellas dactilares y el reconocimiento facial.

También nos encontramos con Intelligent Scan, un nuevo método que combina el sensor de iris y reconocimiento facial a la hora de identificarnos.

El Samsung DEX, el accesorio que, conectando a él el móvil, permite usarlo en una pantalla grande, como si fuera un computador.

Ahora, en lugar de en posición vertical, el móvil se «pincha» al accesorio en horizontal , tumbado y con la pantalla hacia arriba.

De este modo, una vez conectado, el móvil se convierte en un ratón táctil con el que podemos controlar todas las funciones, abrir o cerrar programas, ampliar o reducir fotos, etc

Los nuevos Galaxy S9 y S9+ vendrán en cuatro colores diferentes.

Por una parte tendremos el Midnight Black o negro, pero también un Titanium Gray o gris, y Coral Blue o azul.

También se incorpora un nuevo color púrpura al que han bautizado como Lilac Purple.

Se espera estén disponibles a finales de marzo.

Fuente: Xataca, Engadget, ABC