Dado que el hielo cambia repentinamente, puede cerrar una grieta que corre cientos de metros de profundidad en un glaciar, evitando explorarla con seguridad. A menos que tenga acceso a un dron que no se quede fuera de control al encontrarse un obstáculo.
La nueva tecnología del MIT podría convertir su avión no tripulado en una nave que evita obstáculos con excelentes reflejos, eludiendo árboles o edificios como un colibrí.
Dinamarca ha vuelto a batir el récord supliendo un 42% de su demanda con energía eólica. Otro hito más para un país cuya historia de energías renovables es un ejemplo para todo el mundo.