El Beso de Gustav Klimt es una de las obras de arte más populares del mundo occidental y ahora se exhibe en una impresión 3D.
La pintura original, creada a principios del siglo XX, fue realizada como parte del movimiento vienés Art Nouveau y ha sido bien recibida desde el momento de su creación.
Un hombre sostiene la cara de la mujer que está besando, con sus cuerpos casi indistinguibles uno del otro.
Desafortunadamente, hasta ahora, era imposible para aquellos con impedimentos visuales importantes disfrutar de la escena retratada en la pieza de Klimt.
Ahora, con una pequeña ayuda de una impresora 3D, el Museo Belvedere está haciendo posible explorar esta obra maestra a través del sentido del tacto.
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Lo que el trabajo pierde en color lo gana en profundidad y accesibilidad, permitiendo a las personas que no pueden ver disfrutar de la obra.
El año pasado, el Museo del Prado de Madrid lanzó una exposición titulada “Tocando El Prado” con versiones impresas en 3D de una parte de las obras más famosas de su colección, como las de Goya y El Greco.
Sus trabajos impresos en 3D fueron coloreados a mano de modo que los colores pudieran ser retratados como estaban en los originales.
La versión 3D impresa de The Kiss es más pequeña que la original, pero da acceso a esta joya para aquellos con limitaciones visuales.