La icónica escena de la cabeza de Arnold Ernst Toht derritiéndose en Indiana Jones fue fruto de proceso creativo con moldes de gelatina y yeso.
Hoy en día tendríamos muy fácil emular los efectos de la famosa cara derretida de Indiana Jones: Cazadores del Arca Perdida, uno de los momentos más icónicos de la trilogía original de India Jones, utilizando CGI y animación por computador, pero en 1981 las cosas eran un poco más complicadas.
Durante el rodaje de Indiana Jones, la mayoría de los efectos sobre los personajes están hechos a mano, y lo cierto es que es bastante revelador ver cómo se las ingeniaban para emular este tipo de situaciones.
Ahora, gracias a la gente de Behind de Scenes en YouTube, han querido compartir algunos detalles importantes de cómo se hizo esa famosa escena, el proceso creativo del equipo de efectos especiales (de la compañía de Industrial Light & Magic.) que siguieron para crear ese momento al final de la película del arqueólogo más famoso del mundo.
Todo el proceso se hizo utilizando moldes con diferentes capas y derritiéndolo manualmente con sopletes, grabado en tiempo real para luego ser acelerado en postproducción y alternando diferentes modelos para componer toda la escena.
En total se utilizaron varias simulaciones combinando gelatina y un modelo de yeso, con la forma de la cabeza del actor Ronald Lacey, además de una lámpara calorífica.
Fuente: Hipertextual