Ante la amenaza que constituye el calentamiento global, muchos grupos de científicos están trabajando duro para minimizar la cantidad de combustible que usamos en nuestra vida cotidiana.
La reducción del peso de los vehículos disminuirá a su vez la cantidad de combustible necesaria para su funcionamiento, y ayudará a mitigar el calentamiento global además de ahorrarle dinero al usuario.
En un estudio reciente, el equipo integrado, entre otros, por László Szabó y Kenji Takahashi, ambos de la Universidad de Kanazawa en Japón, ha modificado químicamente un material de desecho de la industria papelera, y lo ha procesado hasta obtener un posible material ligero y fuerte, idóneo para lograr esa reducción de peso en automóviles sin comprometer su robustez.
Este avance tecnológico puede mejorar el ahorro de combustible en el transporte privado y en el público.
Los investigadores comenzaron con la lignina kraft, un subproducto de un proceso común que se realiza sobre la pulpa de madera.
Las fábricas de papel suelen quemar la lignina kraft para generar energía, porque es difícil de usar para otras aplicaciones, excepto unas pocas muy especializadas.
La transformación química de la lignina kraft en un material más útil mejoraría la sostenibilidad ambiental de la producción de papel.
Szabó y sus colegas han realizado una modificación química de la lignina kraft consiguiendo optimizar la capacidad de este material para que sea compatible con otro polímero llamado poliacrilonitrilo, y así preparar fibras de carbono de calidad con las que fabricar un material compuesto, resistente y ligero.
El proceso que han utilizado genera solo un producto secundario bastante benigno, la acetona.
Cuando Szabó y sus colegas reduzcan lo suficiente el costo de preparar sus nuevas fibras de carbono, se abrirá la puerta hacia la fabricación futura de vehículos más ligeros, más robustos y más eficientes en cuanto a combustible.
Dado que todas las industrias utilizan el transporte, todas ellas ahorrarán dinero en este capítulo, y todos los negocios serán más sostenibles desde el punto de vista medioambiental.
Fuente: Noticias de la Ciencia