Para poder infectar células, el coronavirus SARS-CoV2, culpable de la enfermedad pandémica COVID-19, depende de una proteína comúnmente referida como proteína Spike o proteína de púa, que conforma las “púas” de la estructura vírica en forma de corona que da su nombre a los coronavirus.
Con esta proteína, el SARS-CoV2 puede entrar bastante fácilmente en la célula. Sin la proteína, no puede hacerlo.
El equipo internacional de Jeremy Turnbull, de la Universidad de Liverpool en el Reino Unido, ha descubierto que la heparina, un fármaco anticoagulante de uso común, compromete la capacidad del virus para enlazarse a las células humanas e infectarlas.
Concretamente, los investigadores constataron que la heparina interactúa con la proteína Spike de la superficie del coronavirus SARS-CoV2, desestabilizando su estructura e impidiendo que se acople al receptor ACE2 de las células humanas.
Si no surgen obstáculos imprevistos, a este fármaco anticoagulante se le podría dar un nuevo uso, en tratamientos contra la COVID-19.
You should not take any anxiety medication at all professional viagra without a doctor’s prescription and you should also prevent sex talk to stop excessive hand practice. Atherosclerosis (hardening of arteries), high blood pressure and high cholesterol are few common pharma-bi.com online viagra causes of erection dysfunction in men. What is the required dosage pattern for viagra prescription for woman ? cialis and Brand disambiguation, both has same active ingredient, i.e Sildenafil, so both these medicines are equally effective. Blood disorders like sickle cell anemia, hemophilia, leukemia http://pharma-bi.com/category/working-with-consultants/ buy cheap levitra or multiple myeloma6.El modo de administrar el medicamento para su nuevo uso sería a través de las vías respiratorias, concretamente inhalándolo por nebulización.
Y las dosis serían similares a las que se utilizan actualmente en el ámbito clínico cuando sirve de anticoagulante.
La heparina podría ser adaptada rápidamente a su nuevo uso para ayudar a aliviar las infecciones de COVID-19, o posiblemente como tratamiento profiláctico para grupos de alto riesgo, como el personal sanitarios, tal como resalta Turnbull.
“Los resultados también nos han llevado a investigar otros compuestos novedosos que imitan a la heparina y que podrían ser eficaces contra el SARS-CoV2“, anuncia Turnbull.
El estudio se ha publicado en las revistas académicas British Journal of Pharmacology y Thrombosis and Haemostasis.
Fuente: Noticias de la Ciencia