El huracán Sam de categoría 4 ha servido para llevar a cabo una misión científica pionera.
Por primera vez, han utilizado un dron marino equipado con una cámara para grabar el interior del huracán.
Un dron pilotado de manera remota y con un aspecto similar a una tabla de surf.
El dispositivo pertenece a la compañía Saildrone, que junto a la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), han obtenido grabaciones en video, además de otros datos como velocidad del viento, dirección, presión barométrica, temperatura, salinidad, humedad y otros datos para estudiar el comportamiento del huracán.
La embarcación, un vehículo de superficie sin tripulación (USV), es la primera de este estilo que se introduce en un huracán de categoría 4.
En medio del Océano Atlántico, el Saildrone Explorer SD 1045 se tuvo que enfrentar a olas de más de 15 metros y vientos de más de 190 kilómetros por hora.
Una fuerza destructiva de la naturaleza para la que el vehículo estaba preparado.
Equipado con un “ala de huracán“, el dron marino puede adaptarse a las condiciones y recopilar datos en tiempo real para después lograr producir mejores predicciones y simulaciones.
El SD 1045 es uno de los cinco drones marinos diseñados por Saildrone para estudiar los huracanes.
“Estamos orgullosos de haber diseñado un vehículo capaz de operar en las condiciones climáticas más extremas del mundo“, explica Richard Jenkins, fundador de la compañía.
En total, la embarcación autónoma mide siete metros de envergadura.
El video grabado por el SD 1045 transmite bien la peligrosidad de estos huracanes.
Un dron que se encuentra “surfeando” sobre las enormes olas para poder predecir mejor cómo se comportan estos huracanes y así poder avisar con mayor antelación.
Fuente: NOAA