El aprendizaje vocal en las aves podría haber surgido en varios grupos de forma independiente, según un estudio.
Animales que puedan aprender e imitar vocalizaciones de otras especies? Hasta la fecha, se ha descrito este fascinante comportamiento en pájaros cantores, loros y algunos colibríes; y, por el título del artículo, ahora se incluye una especie de pato.
El investigador Carel ten Cate, de la Universidad de Leiden, se quedó boquiabierto al dar con evidencias de aprendizaje vocal en el pato almizclero (Biziura lobata), un ánade endémico de Australia.
Esta habilidad aún no se había descrito en aves acuáticas.
Después de estudiar grabaciones de hace 34 años de un pato almizclero criado en cautividad llamado Ripper, publicó un artículo en la revista Philosophical Transactions of the Royal Society B.
“Cuando escuché y vi por primera vez el informe de que imitaba una voz humana, pensé: ¿es esto un engaño? No lo podía creer.
Sería, es, tan inesperado para una especie de este grupo, que se considera bastante primitiva… El aprendizaje vocal se considera un rasgo bastante avanzado, algo que no estaría presente en cualquier representante de estos grupos; no me lo podía creer”, alega ten Cate en una entrevista para The Scientist.
Como curiosidad, el pato Ripper era capaz de decir “you bloody fool”, que en inglés significa “eres un maldito estúpido“.
Si no lo cree, puede escuchar en este video:
El aprendizaje vocal es una habilidad en que animales y humanos aprenden sonidos de sus experiencias.
Imitan de lo que escuchan a su alrededor, que generalmente serán los padres, pero también pueden ser otros individuos o incluso otras especies.
Si no obtienen ese tipo de exposición, no podrán producir vocalizaciones específicas de su especie o, en el caso humano, sonidos del habla o emplear el lenguaje adecuado.
La conclusión del estudio es que el aprendizaje vocal en las aves evolucionó en varios grupos de forma independiente, en lugar de evolucionar una solo vez e irse perdiendo.
“Cuando miras el cerebro de aprendices vocales como loros y pájaros cantores, y también colibríes, tienen un circuito especial en el cerebro dedicado al aprendizaje vocal, que muestra similitudes entre estas diferentes especies.
Pero los núcleos del cerebro que evolucionaron para centrarse en el aprendizaje en estas especies, hasta donde yo sé, no están presentes, o, si lo están, están muy subdesarrollados o son diferentes, en patos y gansos.
Por tanto, sería muy interesante ver qué está pasando en su cerebro, y saber cuál es la arquitectura neuronal que en este caso permite el aprendizaje vocal.
Eso también puede decirnos algo sobre las opciones que tienen los animales en general para desarrollar este tipo de habilidades y si hay diferentes maneras de llegar al mismo punto final”, concluye ten Cate para The Scientist.
Fuente: The Royal Society Publishing