Una nueva iniciativa de la Unión Astronómica Internacional anima a la población a nombrar 20 exoplanetas analizados por el James Webb.
Ya se realizaron iniciativas similares en 2015 y 2019 y tuvieron muy buena acogida.
En las últimas tres décadas se han descubierto alrededor de 5.000 exoplanetas.
Nombrar todo eso de forma coherente sería muy complicado, de ahí que generalmente se usen designaciones compuestas por números y letras.
Esto hace mucho más sencillo catalogarlos, pero también es un embrollo a la hora de recordarlos o mencionarlos.
Por eso, cada cierto tiempo, la Unión Astronómica Internacional (IAU por sus siglas en inglés) da luz verde para el bautismo de un exoplaneta o sistema planetario con un nombre mucho más sencillo de recordar.
Pero, si bien la IAU es la única autorizada para poner nombre a los exoplanetas, pueden no ser sus miembros los que lo hacen.
En los últimos años, se han abierto varias convocatorias para que sea la población la que se encargue de ello.
Y, tras el éxito de las dos primeras, acaba de abrirse una tercera.
Para participar no es necesario ser un experto en astrofísica.
Puede hacerlo cualquier amante de la astronomía, aunque no tenga estudios sobre ello.
No obstante, aun sin ser obligatorio, se recomienda que se hagan equipos para mandar la propuesta.
Estos pueden incluir personas con diferentes niveles de conocimiento, desde profesores de universidad hasta aficionados a la astronomía.
No basta con enviar el nombre para los exoplanetas sin más, sino que también hay que explicar los motivos por los que sería una buena denominación.
Todo eso se recoge en un dosier, que se envía a la IAU a través de la página designada para ello.
Se recogerán candidaturas hasta el 11 de noviembre.
La primera edición para nombrar exoplanetas tuvo lugar en 2015.
Se solicitó nombre para 14 estrellas y 31 exoplanetas que las orbitan y se recibieron candidaturas de 182 países y territorios.
En la segunda edición, celebrada en 2019, se ofreció a cada país la oportunidad de nombrar un sistema planetario, formado por una estrella y un exoplaneta que la orbita.
En esta oportunidad está prohibida la selección de nombres de personas reales, tanto vivas como fallecidas.
El objetivo es dar cabida a nombres asociados a otras culturas con menos representación en este tipo de eventos.
Este año es muy especial porque los 20 sistemas planetarios que buscan nombre se encuentran entre los primeros analizados por el Telescopio Espacial James Webb.
Fuente: IAU