La creación de músculos artificiales seguros y efectivos para su uso en dispositivos médicos es un campo de investigación en constante evolución.
Actualmente, muchos de los polímeros utilizados para este propósito solo pueden responder a cargas eléctricas peligrosamente altas. Sin embargo, investigadores de los Laboratorios Federales Suizos para Ciencia y Tecnología de Materiales (EMPA) han dado un gran paso adelante en la fabricación de músculos artificiales seguros.
Utilizando polímeros bottlebrush, los investigadores lograron crear películas finas y elásticas que responden a cargas eléctricas mucho más bajas que las actuales.
Los elastómeros electroactivos, como los polímeros bottlebrush, son materiales interesantes para este fin porque son blandos al principio, pero se endurecen al estirarlos.
Además, pueden cambiar de forma cuando se cargan eléctricamente.
Este material podría convertirse en un componente clave de implantes robóticos blandos móviles y órganos artificiales funcionales.
El equipo logró sintetizar un conjunto de polímeros bottlebrush que respondían a tensiones tan bajas como 800 voltios y producían una expansión superior a la de los elastómeros anteriores.
Además, el material de 60 micras de grosor fue el más electroactivo, con una tensión de funcionamiento de solo 1000 voltios.
Aunque todavía se requiere trabajo adicional para garantizar la seguridad y durabilidad de los implantes médicos, estos resultados son una excelente noticia para aquellos que trabajan en este campo.
Con algunos ajustes, el material podría utilizarse algún día para desarrollar implantes duraderos y otros dispositivos médicos que funcionen a voltajes más seguros.