Investigadores han creado un dispositivo que “ve” y forja recuerdos de lo que ha visto, de una manera similar a como lo hace el ser humano.
Este dispositivo de tipo neuromórfico (inspirado en el cerebro humano) es un paso prometedor hacia sistemas de procesamiento de imágenes que permitan a un robot tomar decisiones rápidas y complejas, como deberán hacer los carros autoconducidos en riesgo de accidente.
El avance es obra de un equipo integrado, entre otros, por Sumeet Walia y Aishani Mazumderm, de la de la Universidad RMIT en Australia.
El nuevo dispositivo neuromórfico capta, procesa y almacena información visual.
Gracias a una estructuración precisa del óxido de indio dopado, el dispositivo imita la capacidad del ojo humano para captar la luz, procesarla de manera preliminar y transmitir la información resultante, como haría un nervio óptico, para finalmente almacenarla y clasificarla en un sistema de memoria como podría hacerlo nuestro cerebro.
El dispositivo es además muy pequeño; ocupa un único chip.
El nuevo dispositivo puede realizar todas las funciones necesarias (detección de luz, formación de recuerdos de lo que se ha visto y procesamiento de la información), en vez de tener que depender de cálculos externos, algo, esto último, que impide tomar decisiones en tiempo real.
Hasta ahora, realizar todas estas funciones en un dispositivo pequeño había resultado un gran reto.
“Con nuestro invento hemos hecho posible la toma de decisiones en tiempo real, porque el dispositivo no necesita procesar grandes cantidades de datos irrelevantes y no se ve ralentizado por la transferencia de datos a procesadores separados“, destaca Walia.
El nuevo dispositivo es capaz de retener información durante largos periodos de tiempo, con muy poco consumo energético.
Los sistemas de visión neuromórficos están diseñados para utilizar un procesamiento analógico similar al del cerebro humano, lo que puede reducir enormemente la cantidad de energía necesaria para realizar tareas complejas de procesamiento de imágenes, en comparación con las tecnologías actuales empleadas para esa clase de trabajo.
Un carro autoconducido equipado con esta tecnología será capaz de ver y reconocer objetos en la carretera con la misma facilidad y rapidez con las que lo haría un conductor humano.
Los sistemas tradicionales de visión computerizada (que no pueden miniaturizarse hasta el grado alcanzado por la tecnología neuromórfica) suelen programarse con reglas específicas y no pueden adaptarse fácilmente a situaciones inesperadas.
El ojo humano tiene una sola retina que capta una imagen completa, que luego procesa el cerebro para identificar objetos, colores y otras características visuales.
El nuevo dispositivo emula las capacidades de la retina utilizando sensores de imagen de un solo elemento que captan, almacenan y procesan la información visual en una sola plataforma.
Fuente: Advanced Functional Materials