Mixshield S-880, “Qin Liangyu”, probablemente lo más parecido en nuestro planeta a los temibles gusanos de arena de Arrakis.
Su nombre quizás no impresione demasiado. Sus dimensiones y capacidad sí.
Es una descomunal herramienta perforadora de túneles construida por la firma ingeniería alemana Herrenknecht, con sede en Baden-Württemberg, una veterana del sector de la maquinaria pesada.
Tiene un diámetro de escudo de 17,63 m, mide 120 m de largo, pesa 4.850 toneladas y su potencia de salida es de 5.600 kW, datos que la convierten para el Guinness World Records en la máquina perforadora de túneles más grande que existe.
Según los técnicos de la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos (ASME) es capaz de abrirse paso por el subsuelo, a través de tierra y rocas pesadas creando aproximadamente 30 metros de galería al día.
¿Para qué se fabricó? Para un proyecto no menos impresionante.
La máquina se diseñó para excavar el túnel de la conexión Tuen Mun-Chel Lap Kok, en China.
“Con más de 4,2 kilómetros de longitud y una profundidad de 60 m bajo el mar, el túnel acoge tres carriles de tráfico en la entrada norte, lo que requiere un diámetro externo de 17,6 m, un récord para una tuneladora“, explica Arup al detallar las características de la sección norte del subterráneo, abierta al público a finales de 2020.
Aunque el diseño de la tuneladora S-880 es mérito de Herrenknecht, la encargada de utilizarla fue Dragades Hong Kong, subsidiaria de Bouygues.
ASME explica que la S-880 ayudó a despejar la primera sección del túnel.
Cuando se completó esa tarea, los operarios emplearon un escudo de perforadora algo más pequeño, de 14 metros, para completar el resto de la infraestructura.
Herrenknecht explica cómo Dragages le encargó tres de sus Mixshield para la construcción de dos tubos paralelos, incluida la “estrella”, S-880, dotado de un sorprendente diámetro de 17,6 m y pensado para abrir una primera sección de 650 m de largo.
El Mixshield S-880 “Qin Liangyu” es un TBM, siglas que designan en inglés a las “máquinas perforadoras de túneles”.
Su nombre es bastante clarificador, pero está clase de tuneladoras es mucho más que un enorme y poderoso taladro: además del dispositivo frontal de corte giratorio está dotada de un equipo que le permite recoger los escombros que se van generando a medida que abre las galerías y estabilizar su estructura.
Las máquinas como Qin Liangyu, pensada para trabajar bajo mares y ríos, donde se enfrentan a suelos anegados, están presurizadas para evitar que el túnel pueda inundarse.
A medida que avanzan bajo tierra revisten las paredes con una mezcla hermética especial y bloques de concreto prefabricados y entrelazados.
El Guinness World Records reconoce a S-880 como la TBM más grande del mundo. Que ostente las mayores dimensiones y capacidad no significa sin embargo que haya otras perforadoras igual de impresionantes. O casi.
Destaca por ejemplo Bertha, a la que Guinness le reconoce la medalla de plata en el mundo de las tuneladoras.
En 2013 su enorme cabezal de corte, de 17,5 metros de diámetro, empezó a abrirse paso bajo el suelo de EEUU para dar forma a un proyecto desafiante: un túnel para la ruta estatal 99 bajo Seattle.
El enorme escudo de acero de Bertha incorpora al menos 600 discos de corte capaces de moler la roca a medida que avanza su estructura, de 91 metros de largo.
La encargada de darle forma fue la empresa de ingeniería japonesa Hitachi Zosen.
Tanto el S-880 como Bertha podrían ver amenazado su reinado, sin embargo: hace años Herrenknecht recibió la tarea de fabricar una gigantesca rueda de corte, con un diámetro de 19,25 m que superaría en más de un metro y medio al de Qin Liangyu.
Su destino serían las obras del túnel Orlovksy, en Rusia.
Fuente: Herrenknecht