China está decidida a convertirse, también, en la líder de la alta velocidad ferroviaria.
El país hace tiempo que ha apostado por esta tecnología y eventos como los Juegos Olímpicos de invierno sirvieron para dar un nuevo impulso a la tecnología.
El país está buscando con insistencia reducir los enormes trayectos dentro de sus fronteras.
China cuenta ya con más de 40.000 kilómetros de vías para su alta velocidad ferroviaria y sólo en 2022 se plantearon la instalación de 1.700 kilómetros más.
Es más de la mitad que todos los kilómetros de los que dispone Japón.
Y en esa búsqueda por unir ciudades y poblaciones a velocidades de vértigo, también están dando importantes pasos en materia de trenes.
El último gran avance, sin embargo, lo han dado en la ansiada velocidad máxima.
Aunque no es comparable con los 600 km/h alcanzados por el prototipo de un tren bala japonés, los 453 km/h de velocidad punta que el tren chino CR450 ha conseguido entre las estaciones de Fuqing y Qianzhou ha sido celebrado por China Railway (compañía estatal que opera el servicio), tal y como recogen medios especializados en el país.
El hito se ha conseguido sobre el puente que cruza la bahía de Meizhou, una enorme construcción de más de 14 kilómetros pensada exclusivamente para la alta velocidad, donde se ha hecho la prueba.
Aunque en otras ocasiones se han conseguido velocidades superiores, la prueba es especialmente importante pues se ha realizado en condiciones reales del trayecto y, sobre todo, con velocidades de crucero superiores a 400 km/h.
Además, hay que tener en cuenta que hablamos de un tren bala que no cuenta con levitación magnética.
El CR450 ha nacido dentro del último plan quinquenal del Gobierno chino, con el objetivo de ser el tren bala más rápido del mundo y, sobre todo, con el de instalar en los 400 km/h la velocidad de crucero, para unir Pekín y Shangai en dos horas y media, separadas ahora por casi cinco horas de trayecto.
En estos momentos, China tiene algunos de los trenes más rápidos del mundo, con líneas en las que se alcanzan los 350 km/h.
Si hablamos de trenes de levitación magnética, China ya tiene una línea entre el Aeropuerto Internacional de Pudong y la Estación Lonyang en la que alcanzan los 431 km/h.
Sin embargo, la construcción de líneas para estos trenes es entre dos y tres veces más cara que una tradicional.
Según los organismos chinos, también se ha conseguido que el ruido al viajar a 400 km/h sólo aumente en tres decibelios, en comparación a hacerlo a 350 km/h.
Un avance sustancial pues el ruido generado por estos trenes (tanto dentro como fuera) es uno de los principales inconvenientes de la infraestructura.
Fuente: China Daily