Calcetines con orina permiten enviar mensajes de texto

Por una vez, tener calcetines llenos de orina y bacterias es una buena cosa. Un par de generadores de calcetín, diseñado en la Universidad del Oeste de Inglaterra en Bristol, Reino Unido, son capaces de convertir los desechos humanos y la locomoción en energía eléctrica con un poco de ayuda de microbios.

Caminando con los calcetines unos aproximadamente 648 mililitros de orina circulan a través de tubos integrados hacia  celdas combustibles microbianas (MFC), que contienen bacterias que engullen nutrientes y generan la electricidad.

Esta es la primera vez que alguien ha combinado celdas de combustible microbianas con tecnología portátil.

De hecho, los calcetines producen suficiente electricidad para alimentar un transmisor inalámbrico especializado que envía el mensaje “World’s First Wearable MFC” cada dos minutos.

El quid de la idea era crear un sistema autónomo para la generación de energía en situaciones de supervivencia.

En versiones anteriores, sin embargo, se necesitaba una fuente de alimentación externa a las bombas de alimentación para mover la orina y mantener los microbios alimentados.
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En lugar de contracciones musculares, el calcetín utiliza el poder de exprimir del talón humano para conducir la orina de modo que pasa a través de 24 MFCs flexibles posicionadas en diferentes puntos de todo el calcetín.

El prototipo no aborda la cuestión de cómo exactamente se obtienen las “donaciones líquidas” para los tubos del calcetín.

En el futuro el sistema podría alimentar los dispositivos de emergencia para enviar señales de auxilio para personas lejos de las fuentes tradicionales de electricidad y tecnología de las comunicaciones.

Su sistema no genera una enorme cantidad de energía, pero en caso de emergencia, un solo mensaje de texto puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.

Fuente: Mashable