A Arabia Saudita le gustan las construcciones XXL.
En 2021 sorprendió con su propuesta de The Line, una gigantesca ciudad con forma de pasillo acristalado de 170 kilómetros de largo por 200 metros de ancho.
Y ahora, con las excavadores trabajando ya en esa mole, quiere lanzarse a una nueva aventura arquitectónica de infarto: un enorme cubo de 400 m de alto por otros tantos de largo que se alzará en el centro de Riad. Su nombre, Mukaab.
El objetivo de sus impulsores es crear el mayor edificio de la ciudad, más que la PIF Tower o el Burj Rafal, y dotarlo además de una espectacular forma cúbica de 400×400 m con una fachada formada por triángulos superpuestos.
Dentro tendrá un amplio atrio donde se alzará una torre de forma espiral.
“Será un hito icónico excepcional que contará con las últimas tecnologías innovadoras.
El diseño del Mukaab incluye instalaciones únicas en su género y será una de las estructuras construidas más grandes del mundo, con 400 m de alto, 400 de ancho y 400 de longitud.
Su forma garantizará el máximo aprovechamiento del espacio”, destaca el Public Investment Fund (PIF), cuyo consejo de administración está presidido por el Príncipe Heredero, Mohammed bin Salman bin Abdulaziz.
El bloque se inspirará en el estilo arquitectónico najdi y, remarca el PIF, se convertirá en “el primer destino inmersivo del mundo”, con una “experiencia creada mediante tecnología digital y virtual con lo último en holografía”.
Dentro ofrecerá dos millones de metros cuadrados distribuidos en espacio residencial, hotelero y comercial, con atracciones culturales y turísticas.
“Una puerta de entrada a otro mundo.
The Mukaab será el primer destino inmersivo y experiencial del mundo.
Lo suficientemente grande como para albergar 20 Empire State Buildings, el icono mundial contará con tecnologías innovadoras para transportarte a nuevos mundos“, destacaba hace poco el PIF.
Su diseño, sin embargo, no ha gustado a todos.
Como señala Ummid, hay quien no acaba de ver con buenos ojos su razonable parecido con el Kaaba, un reciento religioso situado en La Meca con un valor crucial para los musulmanes.
Mukaab no será en cualquier caso un edificio aislado.
El propósito de sus impulsores es que se integre en un proyecto más amplio, el New Murabba, que aspira a dotar a Riad del “centro moderno más grande del mundo”: un superficie de 19 kilómetros cuadrados, el proyecto quiere ofrecer más de 25 millones de metros cuadrados, en la que residirían cientos de miles de personas.
De cumplirse los objetivos de sus impulsores, acabará aglutinando algo más de 104.000 unidades residenciales, 9.000 habitaciones de hotel, unos 890.000 metros cuadrados de locales comerciales, 1,4 millones de m2 de oficinas, 620.000 m2 de locales destinados al ocio y 1,8 millones de m2 de uso comunitario.
A la hora de proyectarlo el fondo impulsor ha contemplado también un museo icónico, una universidad de tecnología y diseño e incluso un teatro inmersivo.
“Ofrecerá una experiencia única de vida, trabajo y ocio en un radio de 15 minutos a pie y contará con su propio sistema de transporte interno”, insisten.
Por lo pronto, Mohammad bin Salman ya ha anunciado el lanzamiento de la New Murabba Development Company (NMDC), encargado de su desarrollo.
El FPI calcula que NMDC ayudará a diversificar las fuentes de ingresos de la economía saudí, creará 334.000 empleos directos e indirectos mientras desarrolle su labor y aportará 180.000 millones de SAR, 44.800 millones de euros, al PIB no petrolero.
En cuanto al cronograma, sus responsables no ahondan en detalles, únicamente avanzan: “La finalización del proyecto está prevista para 2030”.
Sus datos son impresionantes, pero palidecen cuando se comparan con desplegados por The Line, proyecto que lleva al límite el concepto mismo de megaconstrucción, con una metrópoli de 170 kilómetros de largo por 500 metros de alto y 200 de ancho, unas dimensiones que le harán parecer un enorme pasillo acristalado en mitad del desierto con capacidad para nueve millones de personas.
Fuente: Mukaab