Crean fármaco contra el cáncer sin pruebas en animales, utilizando un chip de simulación humana

Profesor de la Universidad Hebrea dice que la tecnología que imita el cuerpo humano ahora se puede usar para desarrollar otros tratamientos nuevos, ahorrando tiempo, vidas de animales y dinero.

Científicos israelíes han desarrollado un medicamento contra el cáncer sin probarlo en animales mediante el uso de un chip que simula el cuerpo humano.

Investigadores de la Universidad Hebrea crearon un chip que contiene tejido humano con sensores microscópicos para monitorear con precisión la respuesta del cuerpo humano (riñón, hígado y corazón) a tratamientos con medicamentos específicos.

La idea de la tecnología de órgano en chip tiene 30 años, pero se cree que el equipo israelí es el primero en crear con éxito un nuevo tratamiento utilizando las capacidades de un chip para eliminar por completo las pruebas con animales.

Tienen tanta confianza en su investigación, que combinó dos medicamentos existentes para resolver un problema de exceso de grasa en el hígado que experimentan algunos pacientes con cáncer, que están presentando la combinación para una patente, para ensayos clínicos y para la aprobación de US Food and Drug Administration, todo ello sin hacer las pruebas normales con animales.

El éxito se informó en la última edición de la revista científica Science Translational Medicine.

“Hasta donde sabemos, esta es la primera vez que un medicamento da este paso sin pruebas en animales, y la razón es que hemos eliminado esta necesidad mediante el uso de nuestra tecnología ‘humano en un chip’“, dijo el profesor Yaakov Nahmias, quien dirige el investigación.

“Esta es la primera demostración de que podemos utilizar dicha tecnología para eludir los experimentos con animales, y esto podría conducir a un desarrollo de fármacos más rápido, seguro y eficaz.

Llevar un medicamento al punto de los ensayos clínicos normalmente lleva de cuatro a seis años, cientos de animales y cuesta millones de dólares.

Lo hemos hecho en ocho meses, sin un solo animal, y a una fracción del costo“.

Añadió que, dado que los chips tienen el potencial de imitar el cuerpo humano con mucha más precisión que los animales, la tecnología podría aumentar la precisión del desarrollo de fármacos.

Nahmias, director del Centro Grass de Bioingeniería de la Universidad Hebrea, se propuso resolver el problema de que el cisplatino, un fármaco contra el cáncer de uso común, provoca una acumulación de grasa en los riñones humanos.

Informó que cuando “alimentó” su chip con cisplatino junto con el medicamento para la diabetes empagliflozina, que está diseñado para limitar la absorción de azúcar en los riñones, quedó claro que el medicamento para la diabetes redujo la acumulación de grasa.

Buscó si había datos del mundo real que respaldaran su hallazgo y descubrió que los pacientes con cáncer que reciben cisplatino y que también toman empagliflozina para la diabetes son menos propensos a la acumulación de grasa en los riñones.

Esto surgió como un patrón claro entre 247 pacientes, dijo.

Nahmias comparó su avance con el desarrollo de los primeros autos con autodiagnóstico que informan de sus problemas y sugieren soluciones a través de una computadora de garaje.

“Hoy en día, podemos saber fácilmente si nuestro automóvil tiene una llanta pinchada o una fuga de aceite; nuestro tablero se ilumina porque colocamos sensores en todos los lugares que pueden fallar en un automóvil“, dijo.

“Cuando nuestro automóvil falla, simplemente lo conectamos a una computadora que puede decirnos qué está mal.

Imagínese haciendo lo mismo, pero para el cuerpo humano. De repente, esto parece realista”.

Fuentes: The Times of Israel, Futurism