Descubren material que se fabrica como plástico y conduce electricidad como metal

Desde la Universidad de Chicago han descubierto una forma de crear un material capaz de conducir electricidad como cualquier metal, pero que no cuenta con las propiedades de uno.

De hecho, se fabrica como un plástico, y podría cambiar el panorama de la industria.

Científicos han desarrollado nuevos conductores eléctricos, fabricados como plástico, y capaces de conducir electricidad como cualquier metal.

¿Cómo lo han logrado? En resumen, se ha reordenado los fragmentos moleculares que componen al material.

De esta forma, obtenemos un producto flexible, pero capaz de conducir electricidad extremadamente bien.

Para un científico este sería el equivalente de “ver a un auto conducir sobre agua y poder hacerlo a 112 kilómetros por hora”.

Es decir, algo que va en contra de toda la lógica de lo que conocemos, pero capaz de convertirse en algo revolucionario para más de una industria a la vez.

En principio, esto abre el diseño de toda una nueva clase de materiales que conducen la electricidad, son fáciles de moldear y son muy robustos en condiciones cotidianas.

Los materiales conductores son esenciales en la actualidad.

Gracias a ellos, podemos tener dispositivos electrónicos de todo tipo.

De hecho, tanta es su importancia, que su escasez ha provocado una auténtica crisis entre las compañías manufactureras en la actualidad.

Así, se han retrasado lanzamientos de dispositivos enteros, y cuellos de botellas en la producción de otros, como las consolas de Microsoft y Sony.

Hasta ahora, la variedad de materiales conductores más populares está entre los metales.

Elementos como el oro, el cobre y el aluminio destacan por su uso en la industria.

Hoy, sabemos que podría llegar a incluirse un nuevo material a esta lista, aunque no es la primera vez que se estudia esta posibilidad.

Según rememoran, hace unos 50 años ocurrió un descubrimiento parecido.

En aquel momento, científicos descubrieron que podían crear conductores a partir de materiales orgánicos.

Para lograrlo, lo único que necesitaban era usar un tratamiento químico sobre dicho material.

De esta forma, se cargaba con diferentes átomos y electrones.

No obstante, este método probó no ser el más recomendable.

Después de todo, estos materiales de gran flexibilidad perdían su tratamiento conductor rápidamente.

Entre los diferentes motivos se detectaron altas temperaturas y exposición a humedad.

A pesar de su poca practicidad, este tipo de materiales conductores generó un precedente que otros científicos pudieron seguir.

Así, usando esta técnica de aglomeración de átomos y moléculas a través de filas ordenadas, el científico Then Xie comenzó a experimentar.

Probando con diferentes materiales y órdenes de átomos, logró crear un ejemplar capaz de conducir electricidad de forma fácil y fuerte.

Pero lo mejor de todo es que, además, era muy estable.

Tanto así que no se veía afectado en ninguna medida por calor, frío, humedad, aire o químicos ácidos.

Pero lo más sorprendente de todos es que, a pesar de sus características, el material no cumple con los requisitos para ser un metal.

Según su estructura molecular, esta es demasiado desordenada como para considerarse un material de este tipo.

“No hay una sola teoría que lo explique”, comentó Anderson.

Un descubrimiento de este estilo no ha tardado en alborotar los humores en la comunidad científica.

Además, el material puede ser aplicado a temperatura ambiente, eliminando las limitaciones de lo que se podía hacer al diseñar dispositivos.

Después de todo, para aplicar conductores metálicos, es necesario calentar el dispositivo para procesar el material, cosa que no ocurre con este nuevo ejemplar.

Por supuesto, todavía es muy temprano para augurar cómo afectará este descubrimiento a la industria.

Sin embargo, en una actualidad tan problemática con la industria de conductores eléctricos, podría convertirse en una gran alternativa tras un estudio más exhaustivo.

Fuente: Uchicago News