La presencia de tiburones blancos en las playas de California del Sur incomoda a los bañistas, pero la Iniciativa Benioff Ocean de la Universidad de California tiene un proyecto para intentar controlar la situación.
SharkEye utiliza drones para monitorizar las aguas y cuenta con un sistema de cámaras e inteligencia artificial para detectar automáticamente la presencia de tiburones en el agua.
SharkEye tiene un doble objetivo, por un lado estudiar el comportamiento de los tiburones y por otro lado proteger a los bañistas avisándoles cuando se detecta un tiburón acercándose.
“En la actualidad, se han visto más tiburones blancos frente a la costa de los que hemos visto antes y no hay un gran recurso para comprender esas poblaciones“, explica Michael Jones, jefe de producto de SalesForce, compañía que colabora con el proyecto.
Los investigadores de SharkEye trabajan para mejorar el modelo de aprendizaje de los drones, para que sean capaces de identificar la forma de los tiburones moviéndose por el agua.
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El equipo además trabaja para combinar los datos visuales recopilados por estos drones con la temperatura del océano y los patrones migratorios para así intentar crear un modelo predictivo de cuándo existe más posibilidad que aparezca un tiburón.
Por el momento, SharkEye se encuentra en desarrollo y el movimiento de los drones se realiza de forma manual.
Un piloto, desde la playa, hace volar a un dron preprogramado por un recorrido de unos 16 kilómetros a unos 40 metros de altura.
Este dron no está solo, pues un segundo dron también va grabando sobre el océano.
Los pilotos van monitorizando los videos en tiempo real gracias a la visión por computador y si se detecta un tiburón, se envía un mensaje de texto a las personas inscritas para que puedan transmitir la alerta.
“El beneficio de los drones es que tienes un ojo en el cielo para ver mejor el océano”, explica Douglas McCauley, profesor de la UCSB y director de la iniciativa.
“Es súper barato volar arriba y abajo de la playa. Esa es la parte fácil.
Pero lo que viene después es donde la IA se vuelve realmente valiosa.
Cada hora de metraje de video requiere una hora del tiempo de un analista de video.
Si estás tratando de obtener información valiosa en tiempo real, eso no es eficiente.
Ahí es donde realmente entra en juego la visión por computador, que permite tenerlo en tiempo real“.
SharkEye ha sido utilizado en la playa de Padaro durante los últimos dos veranos.
Se trata de una playa muy popular entre los surfistas y donde es habitual encontrar tiburones blancos jóvenes.
Gracias a este proyecto, los visitantes de la playa pueden recibir avisos de cuándo se ha avistado un tiburón cerca.
Inicialmente, son 36 personas las que reciben el aviso.
Desde vigilantes hasta instructores de surf.
Posteriormente la información se comparte con las autoridades y luego se implementa en distintos canales de comunicación para poder ser consultada abiertamente, de manera equivalente a como se puede mirar el pronóstico del tiempo.
Fuente: Xataca