Pueder suponer que este video fue obra de un animador talentoso, un artista de efectos visuales o un ilusionista.
Pero la única magia en juego aquí son los imanes y una magnífica ejecución de robótica en miniatura.
Este es un verdadero cubo de Rubik que puede resolverse completamente solo mientras flota en el aire.
‘Human Controller’ hace aproximadamente un año comenzó con un cubo de Rubik corriente que actualizó de forma invisible con servos, electrónica, cableado e incluso baterías, lo que le permite girar cualquiera de sus lados multicolores sin Intervención humana.
También fue capaz de “resolverse” automáticamente una vez revuelto, pero en realidad, no se requería mucha lógica para lograr ese truco.
Como se requería que un humano hiciera la codificación manualmente, los componentes electrónicos del interior solo podían grabar cada giro y vuelta, y los recrearon a la inversa para crear un cubo resuelto en color.
No parece haber ninguna mejora en la velocidad del cubo que se resuelve por sí mismo: los solucionadores robóticos y humanos más rápidos del mundo aún la derrotarían.
Pero gracias a algunos imanes ubicados estratégicamente en el interior (y una base magnética ingeniosamente oculta), el Cubo de Rubik mejorado ya no necesita que un humano agarre precariamente una esquina mientras realiza sus hazañas de resolución automática.
Ahora flota con gracia en el aire como una ilusión sacada del repertorio de David Copperfield, pero de alguna manera aún más cautivadora porque sabe cómo funciona.
Fuente: Gizmodo
Samsung ha presentado Gauss, su propio modelo de inteligencia artificial generativa. Puede procesar lenguaje natural,…
Un equipo de físicos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) ha descubierto una propiedad…
Una carcasa experimental de marcapasos sin cables puede recargar parcialmente la batería del dispositivo generando…
No había mucho en juego, ya que era solo una demostración en vivo, pero la…
La prótesis decodifica señales del centro del habla del cerebro para predecir qué sonido alguien…
El invento ya se probó en un paciente francés, de 63 años, al que le…