Fábrica de cucarachas cíborg

Un equipo de ingenieros mecánicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang, en Singapur, ha desarrollado una forma de automatizar el proceso de fusión de cucarachas vivas y dispositivos electrónicos para crear cucarachas cyborg, acelerando enormemente el proceso.

En su estudio el grupo enseñó a un brazo robótico a conectar dispositivos electrónicos a insectos vivos.

Investigaciones anteriores han demostrado que es posible conectar dispositivos electrónicos a insectos vivos como las cucarachas para controlar de forma remota su comportamiento sin hacerles daño.

La tecnología suele adoptar la forma de una pequeña mochila que contiene dispositivos de comunicación y procesamiento eléctrico, y sondas que estimulan al insecto.

Estimular la antena izquierda, por ejemplo, puede hacer que una cucaracha gire a la izquierda.

Las investigaciones también han demostrado que el proceso de conexión requiere tiempo, paciencia y destreza.

La mayoría de los investigadores que trabajan en este tipo de proyectos han informado de que el proceso lleva aproximadamente 30 minutos.

Los investigadores que buscan construir ejércitos de estos insectos cíborg han notado que el tiempo de conexión es demasiado largo: crear cientos o miles de ellos para las tareas de búsqueda y rescate costaría demasiado en mano de obra.

En este nuevo estudio, el equipo de Singapur ha desarrollado una forma de automatizar el proceso que no solo hace que el trabajo sea más consistente, sino que lo hace en una fracción del tiempo.

El sistema funciona primero exponiendo a los insectos al dióxido de carbono, lo que los pone a dormir.

Luego, las cucarachas se colocan en una plataforma que las inmoviliza automáticamente utilizando varillas de metal de manera que expongan las partes del cuerpo necesarias.

Luego, un sistema de visión por computadora preprogramado identifica dónde deben ir los componentes electrónicos y envía esa información a un brazo robótico que ha sido entrenado para recoger los componentes electrónicos necesarios y luego sujetarlos al insecto.

Una vez que están en su lugar, las clavijas se retraen y el insecto es libre de irse.

Los investigadores descubrieron que podían producir una cucaracha cíborg cada 68 segundos.

Las pruebas demostraron que los cíborgs funcionaron tan bien como los que se habían conectado manualmente.

El equipo de investigación señala que la siguiente etapa de la investigación es encontrar una manera de hacer que los cíborgs sean autónomos; intentar dirigir de forma remota a cientos de ellos al mismo tiempo no es factible en la actualidad.

Fuente: arXiv