Google presentó «Génesis» a los ejecutivos de medios como el Washington Post, New York Times y Wall Street Journal.
La compañía dice que no quiere reemplazar a los periodistas, sino ayudarles.
Quizás, en un futuro no muy lejano, los errores de sintaxis y puntuación que veas en los artículos sean la única prueba de que un humano estuvo tecleando.
Porque las primeras presentaciones de Génesis dejaron anonadados a los empresarios. Directivos del New York Times que presenciaron una de las pruebas dijeron que la iniciativa de Google era, cuando menos, «inquietante».
Esta inteligencia artificial tendría la capacidad de absorber datos y armar, al instante, textos de noticias enteros.
También ofrecería distintas opciones de titulares y hasta varios estilos de escrituras.
Dos personas del New York Times, que asistieron a la presentación de Google, dijeron que pareciera que la empresa tecnológica «da por sentado el esfuerzo que implica producir noticias certeras e ingeniosas».
Los de Mountain View insisten en que es una oportunidad para «alejar a la industria editorial de las trampas de la IA generativa».
Algunos medios prestigiosos dejaron entrar ya a la inteligencia artificial a sus salas de redacción.
Associated Press (AP), una de las agencias de noticias más importantes del mundo, anunció la semana pasada una sociedad con OpenAI, creadora de ChatGPT.
El acuerdo le permitirá a OpenAI acceder al archivo de noticias, creadas por periodistas humanos, para entrenar a su inteligencia artificial. Y a AP, probar herramientas para generar contenido.
Buzzfeed, CNET y Gizmodo también están probando.
G/O Media, el grupo empresarial detrás de Gizmodo, comenzó a usar esta tecnología a finales del mes pasado.
«Somos una empresa de tecnología líder», dijo el director editorial, Merrill Brown, en un correo electrónico a su equipo.
«Por lo tanto, es absolutamente apropiado, y de hecho es nuestra responsabilidad, hacer todo lo posible para desarrollar iniciativas de inteligencia editorial».
El primer artículo de Gizmodo escrito por la inteligencia artificial se publicó el pasado 5 de julio.
Era una lista cronológica de todas las películas y series de Star Wars.
Pero la máquina falló: no estaban ordenadas y dejó varias afuera.
El grupo contable KPMG estimó que el 43% de las tareas realizadas por autores, escritores y traductores podrían ser realizadas por una inteligencia artificial.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) alerta que 27% de los puestos de trabajo corren alto riesgo de ser automatizados por la irrupción de la inteligencia artificial.
Muchas de las profesiones en peligro son aquellas que consideramos «altamente calificadas».
Bill Gates, cofundador de Microsoft, advirtió en marzo que todo cambiaría:
«La forma en que las personas trabajan, aprenden, viajan, obtienen atención médica y se comunican entre sí». Y, en tono de gurú, declaró entonces: «La era de la inteligencia artificial ha comenzado».
Google ha remitido el siguiente comunicado:
En cooperación con los editores de noticias, especialmente los más pequeños, estamos en las primeras fases de exploración de ideas para proporcionar herramientas de IA que ayuden a los periodistas en su trabajo.
Estas herramientas podrían ayudar a los periodistas con opciones de titulares o diferentes estilos de redacción.
Nuestro objetivo es ofrecer a los profesionales del periodismo la posibilidad de utilizar estas tecnologías emergentes para que mejoren su trabajo y su productividad, del mismo modo que ponemos a su disposición herramientas de asistencia en Gmail y Google Docs.
En pocas palabras, estas soluciones no pretenden, ni pueden, sustituir el papel fundamental de los periodistas a la hora de informar, crear y verificar sus artículos.
Fuente: Reuters