Pixel 3 y Pixel 3 XL: más pantalla que nunca y una cámara trasera que sigue siendo suficiente para Google.

Mantienen su apuesta por una sola cámara trasera, con la que pese a todo han ganado la batalla de la fotografía móvil en pasadas temporadas. ¿Lo conseguirán de nuevo?

La apuesta de Google en el terreno del hardware no es aparentemente muy distinta de lo que hemos visto en otros terminales de gama alta en los últimos meses.

De hecho podríamos decir que es hasta algo más modesta en cuanto a varias de esas especificaciones.

La única diferencia real entre el Pixel 3 y el Pixel 3 XL está en el tamaño: mientras que el Pixel 3 cuenta con una pantalla de 5,5 pulgadas, el Pixel 3 XL cuenta con una pantalla de 6,3 pulgadas que, eso sí, está recortada con un notch bastante pronunciado.

Eso también afecta a la batería, que cuenta con mayor capacidad en el Pixel 3 XL.

Estos dispositivos coinciden en casi todas sus especificaciones, y por ejemplo contamos con un Snapdragon 845 para gobernarlos, el procesador estrella de la temporada que también lo es en estos dispositivos.

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A ese procesador le acompañan 4/6 GB de RAM y 64 o 128 GB de capacidad.

Una de las novedades más importantes está en el soporte de carga inalámbrica (hasta 10 W).

Ambos dispositivos son resistentes al agua, con el estándar IP68.

Google ha presentado su propio accesorio en este ámbito, el Pixel Stand.

Junto a esas especificaciones contamos con conectividad WiFi 802.11ac, Bluetooth 5.0+LE, NFC, y soporte para Titan M Security Module, lo que permite utilizar el móvil de forma más segura para autenticarnos en diversos servicios.

El puerto de conexión es USB-C (USB 3.1 Gen 1), y en la caja, eso sí, se incluye un adaptador de 18W, el cable USB-C a USB-C e incluso unos auriculares USB-C además del adaptador para auriculares que usan el conector de 3,5 mm. Buen detalle por parte de Google.

En Google no parecen tener especial interés por dar un salto notable en el ámbito del diseño de estos terminales, que no han cambiado de forma radical aunque sí han aprovechado esa reducción de marcos, como el resto del mercado, para ganar en ese ratio de porcentaje de pantalla frente al frontal.

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En ese diseño de la parte trasera vuelven a utilizar un mismo color (negro, blanco y un tercero llamado irónicamente “Not Pink”) con dos ligeras tonalidades que diferencian la parte superior en la que se encuentra la cámara de la inferior.

Una de las sorpresas de estos dispositivos es su apuesta por un único sensor fotográfico en la parte trasera.

Teniendo en cuenta que toda la industria, Apple incluida, ha dado el salto a sensores duales, la presencia de un único sensor en este móvil deja claro que en Google no necesitan más para seguir ofreciendo una capacidad fotográfica excepcional.

Eso ya se cumplió con los Pixel de primera y segunda generación, y será interesante ver si con estos nuevos modelos el excelente aprovechamiento de la fotografía computacional se mantiene como una opción que realmente aporta una característica diferencial a estos móviles.

En la parte frontal, eso sí, contamos con dos sensores, uno de los cuales ofrece un gran angular para poder completar selfies de grupo, por ejemplo, o captar una imagen más amplia en selfies convencionales que según Google captura un 184% más de imagen que la cámara frontal del iPhone XS.

Las novedades en el ámbito de la cámara son llamativas en diversos apartados prácticos.

Una de las más interesantes es Top Shot, una característica que captura una ráfaga de fotos que luego permite seleccionar la mejor: no más fotos de grupo en las que unos ojos cerrados o un gesto raro estropean la imagen.

También hay mejoras a las capturas nocturnas gracias a Night Shift, que hace uso de la inteligencia artificial para “iluminar” las fotos que tomamos en condiciones de baja luminosidad.

Según Google, prácticamente no necesitaremos ya usar el flash en casi ninguna ocasión.

El nuevo Zoom de Alta Resolución permite mejorar la nitidez de las imágenes al utilizar el zoom, y hay otros modos interesantes de video como el Autoenfoque en movimiento que permite establecer el enfoque en un objeto en movimiento para que tanto la foto como el video siempre mantengan centrado ese foco.

Esas características se siguen nutriendo del modo HDR+ potenciado por el Pixel Visual Core, el coprocesador de los Pixel que permite computar esa información para combinarla y obtener más detalle e imágenes más brillantes en todos los sentidos.

A esa opción se unen otras más orientadas al ocio como Playground, que permite introducir personajes animados (como algunos personajes de Marvel Studios) para crear capturas y videos más divertidos.

Los nuevos teléfonos móviles de Google estarán disponibles a partir del 18 de octubre en Estados Unidos.

Fuente: Xataca

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