Se enfoca en movimientos sutiles de la cabeza para identificar videos manipulados.
Una nueva herramienta desarrollada por investigadores del Instituto de Ciencias de la Información de la USC (USC ISI) puede resultar de gran ayuda en la guerra en curso contra los deepkafes.
La herramienta se centra en los movimientos sutiles de la cara y la cabeza, así como artefactos en los archivos para determinar si un video se ha falsificado, y supuestamente puede identificar los videos generados por computadora con una precisión de hasta el 96 por ciento, según un artículo publicado por la Computer Vision Foundation.
Los modelos estándar de detección de deepfakes analizan los videos fotograma a fotograma para detectar cualquier signo de manipulación.
La nueva técnica creada por los investigadores de la USC requiere mucha menos capacidad de computación y tiempo.
Revisa todo un video a la vez, lo que le permite procesar la información mucho más rápido.
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Podría ser una ligera señal de cómo se mueven los párpados de la persona o un movimiento extraño durante un gesto, cosas que los investigadores denominan “firmas biométricas blandas”.
Debido a que la mayoría de los algoritmos deepfake no modelan completamente los movimientos de una persona de esta manera, pueden ser claves para descubrirlos.
Los investigadores utilizaron un conjunto de datos de aproximadamente 1,000 videos manipulados para entrenar su herramienta, y se convirtió en un experto en la identificación de las falsificaciones de figuras políticas y celebridades.
Detener su propagación antes de que nuestras fuentes se inunden con información errónea es de suma importancia.
Fuente: Engadget