Las ruedas paralelas reaccionan automáticamente en relación con la carrocería para mantener el vehículo en perfecto equilibrio, incluso a altas velocidades.
Con la intención de ser práctico y eficiente para el uso diario en ciudades y carreteras, SHANE adopta las leyes de la física dentro de un enfoque con visión de futuro para crear una experiencia de conducción futurista para los conductores de hoy.
El centro de gravedad cambiante de SHANE en relación con las ruedas contrarresta el par de conducción y frenado para mantener el automóvil nivelado, haciéndolo tan estable y seguro como si estuviera sobre cuatro ruedas.
Atrás quedó el complicado sistema de dirección de las ruedas delanteras.
En cambio, la maniobrabilidad y el estacionamiento son fáciles con SHANE gracias al control de velocidad diferencial en dos ruedas.
SHANE cuenta con ruedas grandes que minimizan la resistencia a la rodadura y amortiguadores regenerativos en las ruedas que ahorran energía de amortiguación para recargar la batería.
El novedoso concepto, mediante el cual las ruedas reaccionan automáticamente en relación con la carrocería del automóvil para mantenerlo en perfecto equilibrio, significa que el automóvil puede viajar con seguridad a altas velocidades, una capacidad que antes no era posible.
Fuente: Inventist