Cambiar los refrigerios de café por los de ejercicio físico puede ser muy bueno para compensar el sedentarismo de los trabajadores de oficina.
Lo ideal es caminar 5 minutos cada media hora, según un estudio.
Aunque sigue habiendo trabajos que requieren de mucha actividad física, cada vez son más las profesiones que consisten, básicamente, en pasar ocho horas diarias en la silla de una oficina.
Eso, lógicamente, es una forma de sedentarismo y puede tener consecuencias muy negativas para la salud.
Por eso, cada vez son más las campañas dirigidas a concienciar a estos trabajadores para que realicen algo de ejercicio físico cada día.
Sin duda, es una buena solución. No obstante, según un estudio recién publicado por científicos de la Universidad de Columbia, también es importante minimizar las horas que el trabajador permanece sentado sin descanso.
Para ello, se suelen recomendar lo que se conocen como refrigerios de ejercicio.
Que en vez de levantarse a la máquina de café o snacks, lo hagan para caminar un poco o realizar algún otro ejercicio físico.
Existen múltiples ejercicios dirigidos a analizar los efectos de estos refrigerios. Sin embargo, no se suelen comparar varias opciones.
Por eso es tan interesante esta nueva investigación, en ella se comparan distintas opciones, en las que se varía el tiempo de ejercicio y su distanciamiento.
Finalmente, se concluye que lo óptimo es caminar 5 minutos cada media hora.
Puede parecer tedioso, pero lo cierto es que consiguió incluso mejorar el estado de ánimo de los participantes.
En este estudio participaron 11 personas, sin problemas de salud previos, con edades comprendidas entre los 40 y los 60 años.
Todos ellos tuvieron que estar ocho horas sentados en una silla ergonómica, similar a las que utilizan los trabajadores de oficina.
En ese tiempo pudieron leer, mirar su teléfono móvil o usar el computador.
Sin embargo, mientras tanto tuvieron que hacer cuatro tipos de descanso.
Una caminata de un minuto cada 30 o 60 minutos, o una caminata de cinco minutos cada 30 o 60 minutos.
En todo caso, este ejercicio se hizo sobre una cinta de correr, pero se podría sustituir por un paseo.
Para ver cómo había influenciado esto a su salud, se tomaron medidas periódicas de su azúcar en sangre y su tensión arterial, ya que ambos son muy buenos marcadores de la salud cardiometabólica.
Así, se observó que los mejores resultados se obtenían con paseos de cinco minutos cada media hora.
De hecho, de este modo se reducían los picos de azúcar de las comidas en un 58% y la presión arterial se disminuía entre 4 y 5 mm Hg.
Las caminatas de 1 minuto cada media hora también propiciaron mejoras en estos marcadores, aunque no tan significativas.
En cambio, si los refrigerios de ejercicio físico de los trabajadores se hacían cada hora, no había beneficios remarcables.
Las mejorías obtenidas eran comparables a hacer ejercicio diariamente durante seis meses.
Por lo tanto, si bien realizar ejercicio fuera de las horas de trabajo es altamente recomendable, se pueden obtener resultados muy buenos, en menos tiempo, con estos curiosos refrigerios.
Ahora bien, dado que es algo poco convencional, que podría resultar molesto, también se evaluó el estado de ánimo, la fatiga y el rendimiento cognitivo de los participantes durante la prueba.
Así, se vio que en todos los casos, salvo en caminar un minuto cada hora, mejoró el estado de ánimo y se redujo la fatiga. Son todo ventajas.
El siguiente paso de estos científicos será repetir el experimento con más participantes, de edades más variadas y estados de salud diferentes.
Sería interesante, por ejemplo, comprobar cómo afecta a quienes ya tienen algún problema de salud cardiometabólica.
Además, planean probar más de 20 combinaciones diferentes, para dar con el refrigerio de ejercicio físico perfecto.
Los tiempos cambian y los trabajadores pasan más tiempo sentados, pero no hay que rendirse al sedentarismo.
Existen soluciones, ahora solo queda encontrar cuál es la idónea.