Actualmente, el mundo sufre preocupantes problemas medioambientales causados por los residuos plásticos.
Científicos han ideado un modo, mediante microbios, de obtener un sucedáneo de plástico biodegradable y capaz de reemplazar al popular tereftalato de polietileno, más conocido como PET por sus siglas en inglés, que es el plástico típico del que están hechas muchas botellas de usar y tirar.
El logro es obra de un equipo integrado, entre otros, por Sang Yup Lee, Cindy Pricilia, Cheon Woo Moon y Jae Sung Cho, del Instituto de Ciencia y Tecnología Avanzadas de Corea del Sur (KAIST).
Algunos ácidos dicarboxílicos tienen mejores propiedades físicas y mayor biodegradabilidad que el PET cuando se sintetizan como polímeros, y están atrayendo la atención como monómeros respetuosos con el medioambiente que pueden sintetizarse en polímeros.
Por desgracia, la producción de esos ácidos dicarboxílicos mediante métodos químicos presenta los problemas de bajo rendimiento, baja selectividad, condiciones de reacción complejas y generación de residuos peligrosos.
Buscando una solución para estos problemas, Sang Yup Lee y sus colegas recurrieron la ingeniería metabólica para desarrollar una cepa de bacterias del género Corynebacterium que produce eficientemente varios tipos de ácidos dicarboxílicos aptos para la elaboración de un sustituto del PET.
Las bacterias Corynebacterium se utilizan mayormente para la producción de aminoácidos.
Esta vía bacteriana para elaborar un sustituto del plástico PET promete ahora convertirse en la base para procesos de producción industrial de ese sucedáneo de plástico a gran escala y probablemente también inspire nuevas investigaciones encaminadas a idear métodos similares para producir otros tipos de plástico.
Fuente: NIH