¿Qué veríamos al aproximarnos a un agujero negro?
El pasado mes de abril, el EHT (o Telescopio del Horizonte de Sucesos) nos permitía captar la primera fotografía de un agujero negro en toda la historia humana.
Sin embargo, pese al innegable logro científico que esto supuso, la poca definición de la imagen impidió que fuera útil a la hora de permitirnos visualizar mentalmente el aspecto de estos enigmáticos fenómenos cósmicos.
Pero la NASA cree haber logrado generar una simulación suficientemente realista de cómo habría sido esa fotografía si hubiéramos podido viajar hasta las proximidades del propio agujero negro para tomarla. Y sería algo así:
La visualización publicada muestra cómo el tirón gravitacional del agujero negro distorsionaría nuestra visión del mismo, dotando de una apariencia deforme de doble joroba al disco de materia que lo rodea, uno de los dos elementos, ambos externos al propio agujero negro, que podemos ver en realidad, puesto que de su interior no escapa ni la misma luz.
“Los nudos brillantes [de materia] se forman y se disipan constantemente en el disco a medida que los campos magnéticos se enrollan y retuercen a través del agitado gas”.
Este disco, llamado “disco de acrecimiento”, se divide en varios carriles de distinta luminosidad: más luminosos cuanta mayor es su cercanía al agujero, debido a que están más calientes porque dicha cercanía los hace girar a la velocidad de la luz.
Los carriles exteriores, por el contrario, son ligeramente más oscuros y fríos porque su velocidad se va reduciendo.
Cuando vemos el agujero negro de lado, vemos los ‘carriles’ de gas del lado izquierdo ligeramente más brillantes que los del derecho debido a que dicho gas se mueve hacia nosotros tan rápido que los efectos de la relatividad resaltan el brillo: como en el lado derecho el gas se aleja de nosotros, también se vuelve ligeramente más tenue.
Pero, una vez que la imagen gira y podemos ver el agujero negro de frente, la asimetría desaparece porque el gas ya no se aleja ni acerca con respecto a nosotros.
Aún más cerca del agujero negro, en forma de un finísimo anillo de luz rodeado de oscuridad, se encuentra la esfera de fotones, formada por aquella luz que ha logrado rodear el agujero negro dos, tres o incluso más veces antes de escapar de su tirón.
Por cierto, la NASA ya publicó hace unos años otra simulación mostrando cómo se vería el espacio si lo observáramos desde la esfera de fotones:
Jeremy Schnittman, científico del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA y responsable del proyecto, “simulaciones y películas como éstas realmente nos ayudan a visualizar lo que Einstein quiso decir cuando afirmó que la gravedad deforma el tejido del espacio-tiempo”.
Fuente: Xataca