Cuando una gota de agua golpea un sartén lo suficientemente caliente, no se evapora instantáneamente. En su lugar, la capa externa de la gota se evapora, produciendo un efecto aislante que hace que resbale a través de la superficie caliente, esto se conoce como el efecto Leidenfrost.
En Nueva Zelanda, un grupo de amigos decidió jugarle una broma a uno de los suyos; con el patrocinio de una compañía cervecera local, hicieron todo lo necesario para cambiar toda el agua que circulaba en una casa, por cerveza.
Se ha conseguido sintetizar un nuevo material con capacidades de adsorción de agua y valores de área de superficie que marcan un récord mundial y que superan los límites de lo que se considerable científicamente viable.