Uno de los grandes problemas de las renovables es la dificultad de almacenar la energía sobrante y ver cómo se desaprovechan miles de megavatios que no pueden ser reutilizados.
En los casos en los que una batería portátil y un cargador solar no funcionan, la energía del viento podría ser la forma de recargar su teléfono inteligente.
Avant Garde Innovations ha logrado desarrollar unas turbinas eólicas del tamaño de un gran ventilador y el precio de un celular de alta gama (unos US$749), capaces de suministrar hasta 5 kilovatios de energía por hora durante 20 años (una nevera consume unos 662 kWh al año).