En el MIT han utilizado un polímero similar al caucho para predecir la cantidad de luz que se transmite a través de un material, en función de su delgadez y elasticidad. El material podría llevar a ventanas que se ajustan automáticamente a la cantidad de luz que dejan entrar.
Hay variedad de tecnologías en desarrollo para matar las bacterias resistentes a los medicamentos, pero científicos de la Universidad de Colorado podría tener una solución más permanente.