Disponer de un plástico con la característica extra de conducir eficazmente el calor podría prevenir el sobrecalentamiento de computadores portátiles, teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos.
En el interior de un microrganismo estresado está la clave para producir una nueva generación de plástico biodegradable, el PHB (Polihidroxibutirato ó ácido polihidroxibutírico).