El calor, que puede ser producto de fuentes como por ejemplo el calentamiento solar o la quema de combustibles fósiles, puede ser convertido en electricidad con una eficiencia muy alta mediante un proceso conocido como conversión termiónica.
El objetivo de «Wristify», como así ha sido bautizado este invento ganador de un concurso del Instituto Tecnológico de Massachusetts, es conseguir que las personas mantengan una temperatura agradable en su cuerpo y así reducir el consumo energético en los hogares.