Un lunes no puede arrancar mejor que haciéndonos sentir lo insignificantes que somos en el tiempo y en el esquema del Universo, y un gráfico como el mostrado, es un ejemplo de ello.
Un lunes no puede arrancar mejor que haciéndonos sentir lo insignificantes que somos en el tiempo y en el esquema del Universo, y un gráfico como el mostrado, es un ejemplo de ello.