Unos científicos han desarrollado un nuevo chip óptico para un telescopio que permite a los astrónomos tener información más concluyente acerca de cuáles de los planetas de fuera de nuestro sistema solar observados podrían sostener algún tipo de vida.
El primer ser vivo de la Tierra fue un microorganismo muy simple y que probablemente vivió hace unos 4.000 millones de años junto a una chimenea hidrotermal.
Una reciente investigación ha sugerido por primera vez cómo pudo aparecer el ARN, quizás la primera molécula de material genético, a partir de las transformaciones de sustancias encontradas en cometas.