Utilizando azúcar, silicona y una impresora 3D, han creado un implante con una red intrincada de vasos sanguíneos que constituye el primer y prometedor paso hacia el desarrollo futuro de tejidos artificiales y hasta órganos, destinados a trasplantes.
Esta línea de investigación y desarrollo podría proporcionar una estrategia para superar uno de los retos más grandes de la medicina regenerativa: cómo suministrar oxígeno y nutrientes a todas las células en un órgano artificial o implante de tejido que precisa de días o semanas para crecer en el laboratorio, con anterioridad a la operación quirúrgica en la que se le trasplante al sujeto receptor.
El nuevo estudio lo ha realizado un equipo de investigación liderado por Jordan Miller, profesor de bioingeniería en la Universidad Rice, y Pavan Atluri, profesor de cirugía en la Universidad de Pensilvania.
Los resultados del estudio muestran que la sangre fluyó con normalidad a través de las estructuras de prueba, que fueron conectadas quirúrgicamente a vasos sanguíneos nativos.
Uno de los obstáculos en la ingeniería de grandes tejidos artificiales, como hígados o riñones, es mantener vivas a las células de su interior.
This type levitra properien of loss affects men more than women and are more likely for developing in such over 50 years of serious weather study and observation at tracks. Muscle activities are a vital purchase viagra from india piece of North Vancouver physiotherapy. Erectile dysfunction can be explained as a situation where the penis does not solidify and extend when a man is icks.org cialis no prescription sexually energized, or when he cannot keep an erection. T3 (liothyronine sodium [Cytomel]) is available and there are certain indications for its use. cialis price Los ingenieros de tejidos han confiado normalmente en la propia capacidad del cuerpo para producir vasos sanguíneos, por ejemplo implantando andamios de tejido dentro de él y esperando que los vasos sanguíneos de los tejidos próximos se extiendan hasta las nuevas estructuras.
Ese proceso puede llevar semanas, y las células dentro de las estructuras a menudo mueren por falta de oxígeno, antes de ser alcanzadas por los vasos sanguíneos que se aproximan lentamente.
Por eso Miller y sus colegas se preguntaron si habría una forma viable de implantar una estructura impresa en 3D a la cual ellos pudieran conectar directamente las arterias anfitrionas y conseguir de forma inmediata la perfusión.
Con los avances que han logrado en su última investigación, ya están ahora dando el primer paso importante hacia ese objetivo.
Fuente: Noticias de la Ciencia