Esta app combina inteligencia artificial y tecnologías de reconocimiento facial para obtener un diagnóstico de la depresión en fases muy tempranas de la misma.
El diagnóstico de la depresión no es sencillo.
En primer lugar, porque cuando una persona siente la apatía mental a la que suele ir asociada puede negarse a buscar ayuda psicológica o médica.
También, porque es un diagnóstico bastante difuso.
Alguien puede tener rasgos depresivos, pero no una depresión como tal y la línea que separa una cuestión de otra no siempre está bien delimitada.
Ahora bien, lo que está claro es que hay momentos vitales en los que las personas necesitan ayuda psicológica para salir adelante.
Detectarlo a tiempo es importante, sobre todo por lo ya mencionado.
Alguien que está ya muy mal puede que no quiera buscar ayuda.
Por eso, la aplicación para celular Mood Capture, desarrollada por científicos de la Universidad de Darmouth, podría ser una herramienta de lo más beneficiosa en un futuro.
La app obtiene un diagnóstico de la depresión antes incluso de que lleguen los primeros síntomas evidentes.
Esto se consigue mediante la captura aleatoria de imágenes del usuario a través de la cámara frontal del teléfono.
Esas imágenes se analizan en busca de rasgos faciales o del entorno, que puedan asociarse con esta cuestión de salud mental.
De momento, las primeras pruebas realizadas con la app han logrado un diagnóstico de la depresión acertado en el 75% de los participantes.
Sus creadores quieren escalar hasta un 90%, por lo que aún se necesita más investigación.
No obstante, creen que en 5 años podría estar lista para su utilización.
Según un estudio realizado por IKEA en España en 2023, 1 de cada 3 personas mira su teléfono más de 100 veces al día.
En otro estudio de este tipo, pero llevado a cabo en Estados Unidos, se calculó que los adultos de dicho país lo hacen una media de 344 veces al día.
Dejando a un lado las implicaciones que esto pueda tener a nivel psicológico, lo que está claro es que es un objeto que forma parte plenamente de nuestro día a día.
Quizás si pusiéramos una cámara de fotos en la plancha de la ropa para observar nuestras expresiones faciales tardaríamos años en recopilar cuatro o cinco imágenes. Pero con el teléfono móvil no hay problema.
Andrew Cambell, uno de los desarrolladores de esta aplicación para el diagnóstico de la depresión, calculó que él mismo había desbloqueado su teléfono más de 800 veces en una semana.
Por eso, él y sus compañeros estuvieron de acuerdo en que esta podría ser una herramienta perfecta para analizar la evolución de las expresiones faciales de los usuarios.
Esta aplicación se basa principalmente en la inteligencia artificial. Por eso, como ocurre siempre con estos algoritmos, inicialmente era necesario entrenarla.
Esto se hizo con ayuda de un grupo de voluntarios que tuvieron que responder a una pregunta concreta mientras miraban su teléfono móvil:
“¿Te has sentido apático, deprimido o sin esperanza?
La pregunta forma parte de un cuestionario, conocido como PQH-8, que se usa precisamente para el diagnóstico de la depresión.
Mientras respondían, el teléfono tomó ráfagas aleatorias de fotografías con la cámara frontal.
De este modo, recopiló información sobre sus expresiones faciales y su entorno, que relacionó con las respuestas sobre el estado de ánimo.
El algoritmo logró correlacionar factores como la mirada, el movimiento de los ojos, la rigidez muscular o la iluminación del ambiente, con el estado de ánimo de los usuarios.
Una vez que se terminó de entrenar al algoritmo, se probó con 175 personas a las que se informó que su teléfono móvil les tomaría fotografías con la cámara frontal.
Sin embargo, no se les dijo cuándo.
De este modo, se recopilaron 125.000 imágenes en 90 días, con las que la inteligencia artificial lanzó su posible diagnóstico de depresión.
Después, esos mismos participantes respondieron a la pregunta del PQH-8 que se usó en el entrenamiento, para comprobar si los resultados de la aplicación habían sido correctos.
El diagnóstico de la depresión fue acertado en un 75% de casos.
Por supuesto, esta aplicación sería solo una llamada de atención.
El diagnóstico de depresión o de rasgos depresivos, debe realizarlo un profesional.
Sí que esperan que pueda servir para animar a los usuarios a buscar a ese profesional antes de que los síntomas estén muy avanzados.
Sería una opción interesante y nada intrusiva, ya que las imágenes nunca saldrían del teléfono móvil. Se procesan directamente en él.
Cabe destacar que el estudio inicialmente se publicó sin revisión por pares.
No obstante, al presentarse a la conferencia CHI 2024 de la Asociación de Maquinaria de Computación se ha sometido a las revisiones necesarias.
Por eso, se publicará finalmente en el próximo mes de mayo, coincidiendo con la realización del congreso.
Desde luego, todo marcha viento en popa, pero aún es pronto para lanzar las campanas al vuelo.
De momento, debemos fiarnos de nuestro criterio y el de las personas que nos rodean. Si siente que algo no va bien en su estado de ánimo o ve que las personas a su alrededor se preocupan por ella, no dude en consultar a un psicólogo.
Fuente: Dartmouth