Ratones tratados con un fármaco antiinflamatorio tuvieron una esperanza de vida más larga y menos problemas de salud relacionados con la edad.
Un fármaco antiinflamatorio prolongó la vida útil de los ratones en un 20 por ciento.
Un fármaco que inhibe la inflamación ayudó a los ratones a vivir más tiempo y redujo la incidencia de cáncer y problemas de salud relacionados con la edad en los animales.
El bloqueo de una molécula inflamatoria conocida como interleucina-11 (IL-11) prolonga la vida útil de los ratones, lo que sugiere que los fármacos que inhiben la IL-11 también pueden tener efectos antienvejecimiento en las personas.
A medida que envejecemos, nuestras células acumulan daños, lo que hace que el sistema inmunológico arroje moléculas inflamatorias como la IL-11.
Si bien pequeñas dosis de inflamación pueden protegernos de enfermedades o lesiones, cantidades excesivas dañan las células, lo que se cree que acelera el envejecimiento.
“Es como echar gasolina al fuego”, dice Stuart Cook de la Facultad de Medicina Duke-NUS de Singapur.
Por lo tanto, sofocar la inflamación podría frenar el deterioro de la salud relacionado con la edad.
Para probar esta idea, Cook y sus colegas inyectaron a 37 ratones un fármaco que utiliza anticuerpos para bloquear la IL-11.
Los ratones recibieron una inyección cada tres semanas a partir de las 75 semanas de edad (comparable a unos 55 años en los humanos) hasta que murieron.
Un grupo separado de 38 ratones recibió una terapia de anticuerpos diferente que no se dirigía a la IL-11.
Los investigadores descubrieron que el bloqueo de la IL-11 prolongaba la vida útil de ratones machos y hembras en más de un 20 por ciento.
En experimentos posteriores, los animales tratados con la terapia anti-IL-11 tenían menos probabilidades de desarrollar cáncer: menos del 16 por ciento de los roedores tratados tenían tumores, en comparación con más del 60 por ciento de los del grupo de control.
La terapia también redujo los niveles de colesterol, la fragilidad y el peso corporal de los animales tratados, y mejoró su fuerza muscular y su metabolismo.
En conjunto, estos hallazgos sugieren que el bloqueo de la IL-11 puede mitigar el deterioro de la salud relacionado con la edad en ratones, además de mejorar la esperanza de vida.
Sin embargo, no sabremos si ocurre lo mismo en las personas hasta que se realicen ensayos clínicos, dice Cook.
Se están realizando múltiples ensayos para probar terapias anti-IL-11 en personas con ciertas afecciones inflamatorias, como la fibrosis pulmonar, pero ninguno está investigando sus posibles efectos antienvejecimiento, afirma.
También es importante tener en cuenta que cierta cantidad de inflamación a medida que envejecemos es normal, dice Shilpa Ravella de la Universidad de Columbia en Nueva York.
Esto hace que sea más difícil saber quién puede beneficiarse de este tipo de terapias antiinflamatorias, afirma.
Fuente: New Scientist