Hay vida más allá de Intel y AMD si nos ceñimos a los microprocesadores para equipos de sobremesa, servidores y estaciones de trabajo.
La arquitectura RISC-V es una alternativa muy interesante a las tecnologías propietarias, y acaba de darnos una sorpresa muy agradable.
La compañía X-Silicon ha desarrollado un microprocesador con una arquitectura muy innovadora.
Lo que hace único a este chip es que apuesta por implementar un único tipo de núcleo que combina una CPU de propósito general con arquitectura RISC-V y una GPU capacitada para afrontar una paralelización masiva de hilos de ejecución.
Actualmente podemos encontrar en el mercado SoC de muchos fabricantes que incorporan varios núcleos de CPU y la lógica de una GPU, pero lo que propone X-Silicon es muy diferente debido a que, su arquitectura se erige sobre un único tipo de núcleo híbrido capaz de llevar a cabo el trabajo de una CPU y una GPU.
El procesador diseñado por X-Silicon tiene una licencia de estándar abierto y código abierto, por lo que cualquier persona o empresa que esté interesada en su tecnología puede acceder a ella.
La industria del hardware lleva mucho tiempo buscando una arquitectura de GPU de estándar abierto que pueda ir de la mano de la arquitectura RISC-V, y ya la tiene.
En cualquier caso, lo más importante es que este chip ha sido ideado para enfrentarse a la ejecución de todo tipo de procesos, incluidos los que están asociados a los programas de inteligencia artificial (IA).
Según sus creadores este procesador es perfecto para afrontar el procesamiento de datos en tiempo real y llevar a cabo el renderizado de gráficos de forma dinámica, dos prestaciones que, sobre el papel, le permitirían derribar las limitaciones que imponen las arquitecturas de GPU convencionales.
Una de las claves de su arquitectura consiste en que se apoya en un motor vectorial RISC-V que trabaja codo con codo con una FPU de 32 bits, un planificador de hilos de ejecución, un motor de rasterización, una unidad de texturas, un procesador de pixeles y un motor neural, entre otras unidades funcionales.
La presencia del motor neural refuerza su vocación de lidiar con los procesos de IA minimizando el consumo de energía.
Sobre el papel la capacidad que tiene este procesador a la hora de ejecutar el código destinado a la CPU y la GPU en el mismo núcleo le permite optimizar el uso de la memoria principal y reducir el consumo de energía debido a que no es necesario copiar datos entre el espacio de memoria asignado a la CPU y el reservado para la GPU.
La versatilidad de esta arquitectura permite que cada núcleo del chip pueda ejecutar gráficos, algoritmos de inteligencia artificial, física, video o cualquier otro tipo de procesos.
X-Silicon, además, asegura que la API para gráficos Vulkan funciona correctamente en la arquitectura de su GPU.
En cualquier caso, la mayor fortaleza de este procesador consiste en que al estar implementado sobre RISC-V cualquiera puede utilizar este diseño sin pagar los derechos de uso que exigen los juegos de instrucciones de otras arquitecturas, como ARM o x86-64.
Fuente: JPR