Investigadores del Swiss Federal Institute of Technology han desarrollado un circuito super delgado, tan flexible que puede funcionar alrededor de un cabello humano o sobre un lente de contacto.
Crearon el circuito en una película de parylene de sólo un micrómetro de espesor. Eso es alrededor de la sexagésima parte del grosor de un cabello humano.
Los científicos lograron esto mediante la construcción del circuito en una base de polímero de vinilo que es disuelto, dejando el circuito ultra-delgado y ultra-flexible intacto.
El circuito resultante puede ser envuelto alrededor de cabello humano, plasmado en la piel humana, o pegado en una hoja de una planta, sin agrietarse o perder conductividad.
El equipo de investigación suizo prevé un circuito transparente sobre un lente de contacto para detectar el aumento de la presión en el ojo que causa el glaucoma.
Otras aplicaciones podrían incluir sensores implantados que monitorizan continuamente la presión arterial en pacientes con problemas cardíacos.
El factor limitante en este momento: todo lo que desee conectar a ese circuito. Las baterías, por ejemplo.
Fuente: Gizmodo