Una nueva técnica hace que los robots basados en genes sean prácticos.
Los robots basados en ADN prometen todo tipo de maquinaria microscópica, pero hay un gran obstáculo: son lentos.
Los diseños existentes que usan procesos bioquímicos para el movimiento pueden demorar horas en mezclar las moléculas, lo que los hace completamente imprácticos para cualquier cosa que sea sensible al tiempo.
Eso podría no ser un obstáculo por mucho más tiempo.
Científicos han desarrollado un nanorobot de ADN (específicamente, un brazo) que usa campos eléctricos para moverse 100.000 veces más rápido que los ejemplos anteriores, a pesar de que se basa en conceptos simples.
Las moléculas de ADN tienen cargas negativas como una cuestión de rutina.
Los investigadores de la Technical University de Munich descubrieron que podían mover el brazo de forma rápida y precisa al someterlo a impulsos eléctricos que tiraban del brazo en la dirección correcta.
Pueden girar el brazo, moverlo a otra posición o incluso hacer que aplique fuerza, todo en milisegundos.
No necesariamente se vería un pequeño número de estos robots basados en genes en acción.
Más bien, se verían a “millones” de ellos trabajando en conjunto como parte de nanofactorías.
Podrían juntar moléculas complejas (por ejemplo, para medicinas) o identificar sustancias en un nivel extremadamente pequeño.
Y de muchas maneras, el nuevo enfoque hace que los nanorobots de ADN sean prácticos.
Fuente: Engadget