Han desarrollado un sistema de captura 3D en tiempo real, que combina a tres unidades Microsoft Kinect y un Oculus Rift que permite visualizar el entorno virtual, creando un Holodeck primitivo.
El vídeo generado a partir de las cámaras en cada Kinect es alimentado a un computador y reproducido en el Oculus Rift, sobre el modelo virtual de una oficina.
El trío de Kinects forma un triángulo equilátero, con cada unidad ubicada a dos metros del punto central.
Los brazos del usuario se ven distorsionados por una simple cuestión de hardware: Los Kinects son de primera generación, y su resolución no es tan alta que digamos.
La oficina es un modelo virtual aparte, y los Kinects no tienen influencia sobre ella, pero aún así nos transmite una sensación de precisión muy completa, probablemente debido a nuevos procesos de calibración que combinan a los tres Kinects con un mínimo margen de error.
Esta captura 3D en tiempo real está a cargo de Oliver Kreylos, de la Universidad de California, Davis.
Su área de investigación se concentra sobre visualización científica, realidad virtual, y la interacción humano-computador bajo entornos virtuales; desarrolla “holodecks”.
Un detalle técnico importante en la captura 3D es la latencia, o mejor dicho, la latencia del Microsoft Kinect.
El algoritmo de reconstrucción que usa la consola genera una latencia demasiado alta para ser útil en entornos de realidad virtual, pero Kreylos trabaja con un vídeo “crudo” y más directo, que le permite reducir la latencia hasta el punto en que deja de ser un problema.
Fuente: Neoteo
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