Investigadores del MIT presentan FibeRobo, un tejido transformable que cambia de forma y que se contrae en respuesta a un aumento de temperatura y luego se revierte automáticamente cuando la temperatura disminuye.
No se requieren sensores integrados ni otros componentes duros.
En una aplicación del mundo real, FibeRobo podría usarse en prendas exteriores como una chaqueta que cambiaría dinámicamente de forma para volverse más aislante y mantenerle abrigado cuando bajan las temperaturas.
Las empresas también podrían combinar la fibra con hilo conductor, que actúa como elemento calefactor cuando la corriente eléctrica lo atraviesa.
Esto permite que la tela cambie de forma dependiendo de información digital como un sensor de frecuencia cardíaca.
“Usamos textiles para todo. Fabricamos aviones con compuestos reforzados con fibras, cubrimos la Estación Espacial Internacional con un tejido que protege contra la radiación, los usamos para expresión personal y ropa de rendimiento.
Gran parte de nuestro entorno es adaptable y receptivo, pero Lo único que necesita ser más adaptable y receptivo (los textiles) es completamente inerte”, dijo Jack Forman, estudiante de posgrado en Tangible Media Group y el Centro de Bits y Átomos del MIT Media Lab.
Fuente: MIT News