Para ahorrar energía, muchos insectos giran la cabeza, en lugar de todo el cuerpo, para explorar el mundo que los rodea.
Los investigadores ahora han replicado esto con una pequeña cámara con un brazo único que pueden maniobrar desde un teléfono inteligente.
El sistema total pesa solo 248 miligramos, menos de un billete de dólar.
Cuando se sujeta a la espalda de un escarabajo, la cámara puede transmitir video en tiempo real.
También puede pivotar para proporcionar una vista panorámica desde la perspectiva del escarabajo.
Además, cuando la cámara se montó en un robot del tamaño de un insecto, el robot usó hasta 84 veces menos energía moviendo el brazo de la cámara en lugar de todo su cuerpo.
Esta tecnología es uno de los sistemas de visión más pequeños y autoamplificados hasta la fecha, informan los investigadores.
En el futuro, los científicos podrían usar estas pequeñas cámaras para conocer los hábitos de los insectos fuera del laboratorio.
Fuente: Science