El gigantesco robot Prosthesis en realidad es un exoesqueleto donde hay un humano dentro pilotándolo, pesa cuatro toneladas y ni se inmuta al tener que levantar un carro.
Pero el objetivo final de sus creadores es otro: peleas de robots gigantescos.
Sabemos que en Japón se están apresurando para construir a Gunman, un robot de 20 metros que podrá moverse.
Ahora bien, no parece que vaya a tener tanta movilidad y agilidad como Prosthesis.
Además hay otra diferencia clave, Prosthesis es en realidad una “extensión” del piloto que lleva en su interior, al reproducir los movimientos que hace el cuerpo del piloto.
Prosthesis se hizo público en realidad en 2017, a modo de prototipo.
Ahora Furrion Exo-Bionics, la marca detrás de Prosthesis, dice que ya tiene una versión final disponible.
Y es espectacular. Un robot cuadrúpedo que pesa más de 4.000 kilogramos y tiene unos cuatro metros tanto de altura como de anchura.
Dicen sus creadores que tiene un total de 200 caballos de fuerza.
En el “corazón” de Prosthesis es donde se monta el piloto.
Una vez está dentro todos sus movimientos son replicados por el exoesqueleto.
Es decir, no hay ni joystick ni mandos como tal, sino sensores en el cuerpo del piloto que recogen los movimientos de las piernas o los brazos por ejemplo para mover al exoesqueleto.
¿El resultado de construir esta criatura?
Videos e imágenes que parecen sacados de una película de ciencia ficción.
Distintos vídeos publicados por la marca nos permiten ver cómo se mueve (a decente velocidad), levanta y aplasta autos o se enfrenta a un camión para ver cuál de los dos es más fuerte.
El hecho de que sea cuadrúpedo en vez de bípedo no es causalidad.
Según indican sus creadores a CNET, esto permite tener mayor estabilidad por el factor forma de una estructura con cuatro patas en vez de dos.
Dicen que han estado desarrollando a Prosthesis durante diez años.
Ahora que ya está construido, es momento de mostrarlo al público y prepararlo para su objetivo final.
O más bien preparar a los humanos, porque la idea es que Prosthesis sea un exoesqueleto para competiciones de lucha.
Para ello Furrion Exo-Bionics está buscando a pilotos que entrenar y sepan controlar a Prosthesis.
No es que sea difícil encontrar a voluntarios que busquen luchar con máquinas de varias toneladas, el tema está en el precio a pagar.
Alrededor de unos 10.000 dólares por tres días de entrenamiento con Prosthesis para tener una licencia de piloto.
También es posible sólo verlo como público por varios cientos de dólares o probar a levantar un carro pagando algo más.
Los exoesqueletos sin duda no son sólo para ayudar a personas con dificultades de movimiento o para mejorar corriendo.
Veremos si en los próximos años llega a popularizarse este “deporte”.
Fuente: Xataca