Gracias a la investigación de Alcatel-Lucent se podrían usar las viejas líneas telefónicas de cobre para tener una conexión a Internet de alta velocidad.
El estándar en que trabajan, llamado G.fast, turbocarga las líneas telefónicas existentes ofreciendo velocidades de fibra óptica sobre trenzados de cobre.
La nueva tecnología amplía el rango de frecuencias disponibles sobre las líneas de cobre y elimina la interferencia.
Sobre una distancia de 200 metros, puede enviar datos a 1.1 gigabits por segundo, cayendo a 500 megabits por segundo en 300 metros.
Por ahora, la tecnología funciona mejor sobre la distancia del poste de teléfono a la casa, lo que ayudaría a los proveedores de servicios de Internet, a eliminar un obstáculo logístico serio cuando se trata de llevar internet de ultra alta velocidad a los hogares.
Alcatel-Lucent siguen realizando pruebas de este estándar y esperan tener luz verde de International Telecommunications Union para el 2.014 y comercializar a partir del 2.015.
Fuentes: