El NFC es una tecnología de comunicación inalámbrica que nos permite la transmisión de pocos datos sin apenas consumo de recursos.
Ocurre algo similar con las pantalla de tinta electrónica, donde el consumo de recursos es ínfimo al mismo tiempo que la capacidad de los paneles se limita considerablemente en comparación con una pantalla normal.
Waveshare ha unificado las dos tecnologías para crear un “monitor” que prácticamente no requiere de energía y procesador.
Waveshare ofrece una pantalla de 7,5 pulgadas de tamaño (también hay modelos más pequeños) por menos de 70 euros/dólares.
Su panel de tinta electrónica y monocromático tiene una resolución de apenas 800 x 480 pixeles.
La tasa de refresco aquí no se cuenta en hercios, sino directamente en segundos, porque tarda unos 5 segundos en cambiar cada imagen.
Evidentemente no está pensada para ver una película.
Una de las cosas más interesantes de Waveshare es su funcionamiento interno.
El panel no tiene batería que lo alimente, tampoco un cable para enchufarlo a una fuente de alimentación.
Toda la energía que necesita Waveshare la obtiene del dispositivo que transmite la información por NFC.
Porque al ser una pantalla de tinta electrónica (sin retroiluminación) sólo requiere de energía para modificar los pixeles con cada nueva imagen.
Para cambiar la imagen una app en el dispositivo móvil envía los datos de la nueva imagen así como la energía necesaria para cambiarla.
Todo ello mediante el chip NFC del teléfono y del panel.
La app permite enviar todo tipo de composiciones con texto, pero también hacer por ejemplo una fotografía, convertirla a monocromático y enviarla al panel Waveshare.
Si nos fijamos en el video de demostración, requiere de unos cuantos segundos para enviar tanto la información como la energía.
Las transferencias son a 424 kbit/s, normalmente al usar un NFC enviamos unos cuantos bits para una URL o algún texto corto, pero en este caso al ser imágenes requiere de algo más de tiempo.
Al no requerir prácticamente de recursos, el panel Waveshare puede ser sin duda una gran idea para colocar por ejemplo señales o información útil (horarios, direcciones, datos de consulta…) en lugares públicos como tiendas.
Sin cables, sin tener que instalar nada y con sólo una app desde la que gestionar todo en el móvil es desde luego una forma ingeniosa de sacarle provecho a la tecnología de tinta electrónica y al NFC.
Fuente: Xataca