En Reino Unido están probando esta alternativa para las operaciones de rescate.
Hasta ahora la mayoría de veces que hemos visto a alguien volar en jetpack ha sido para algún espectáculo o prueba de capacidades.
Poco a poco esto va cambiando para incorporar también tareas de utilidad real.
Ejemplo de ello es cómo en Reino Unido están probando a realizar operaciones de rescate en jetpack.
Llegar a zonas remotas rápidamente es esencial para salvar la vida de una persona, y a menudo un jetpack llega antes que una ambulancia o un helicóptero.
Gravity Industries, que desarrolla equipos jetpack, ha trabajando en colaboración con el Servicio de Ambulancias del Área de Great North (GNAAS) de Reino Unido.
El resultado de esta colaboración es un jetpack especial para los paramédicos con el que pueden llegar rápidamente a las víctimas para ofrecerles ayuda médica.
En pruebas simuladas dicen que llegaron a la víctima en una zona montañosa en tan sólo 90 segundos.
El tiempo es uno de los principales enemigos en situaciones de emergencia para los servicios sanitarios.
Llegar cuanto antes es esencial para estabilizar al paciente, aunque poner en marcha un helicóptero y conseguir aterrizar o esperar en el aire no siempre es tan rápido.
La idea es que un paramédico pueda aligerar todo este proceso llegando en jetpack primero para atender al paciente mientras llega el helicóptero.
Si nos fijamos en el jetpack, dispone de múltiples propulsores tanto en la espalda del piloto como en sus brazos.
Estos propulsores utilizan combustible como un propulsor de avión normal (nada de hélices y eléctrico).
Aparte de eso destaca una pantalla que le indica al piloto cuánto combustible le queda, la velocidad a la que va o la altura a la que se encuentra por ejemplo.
Generalmente esperan volar a poca altura y cerca del suelo en caso de que falle el jetpack (no es muy alentador esto último).
Si bien parece una solución excelente, hay unos cuantos inconvenientes a tener en cuenta.
El jetpack sólo permite vuelos de entre 5 y 10 minutos, dependiendo de la altura y velocidad que se alcanza.
Por otra parte, el piloto debe tener un entrenamiento y una especialización muy alta, además de buenas condiciones físicas para soportar el impulso de los propulsores en los brazos.
Y si hablamos de precio, estos jetpack pueden costar varios cientos de miles de euros.
Dicho todo esto, pueden ser incluso más baratos y fáciles de utilizar que un helicóptero.
Quizás no para todos los paramédicos y quizás no para cualquier situación o lugar, pero no sería nada extraño que cada vez veamos más aplicaciones como esta de la tecnología de los jetpack en operaciones de rescate.