Estas porristas robot son lindas y alegres, pero también están llenas de algunas de las tecnologías avanzadas para automóviles desarrolladas hoy en día.
Estos robots del fabricante de electrónica japonesa Murata giran con libertad sobre una esfera y son capaces de rodar en formación con los otros durante su estancia en posición vertical.
Las porristas contienen cada una tres sensores giroscópicos que trabajan a una velocidad de 1.000 cálculos por segundo para mantener su cuerpo en posición vertical sobre las esferas y moverse en la dirección correcta.
Los robots se comunican con dos paneles equipados con sensores de ultrasonidos e infrarrojos (similares a los que utiliza el Xbox Kinect) que les reconocen y sincronizan con un programa de computador.
Murata fabrica estos sensores y otros componentes para una variedad de clientes industriales, incluidos los fabricantes de automóviles, que utilizan los sensores giroscópicos para el control electrónico de estabilidad.
Los sensores se utilizan para mantener lentes de cámara estables en vibraciones.
Fuente: Mashable