El pasado 24 de febrero en las Islas Malvinas (un lugar donde la cobertura móvil es nula) un teléfono Android recibió un SMS.
Sin antenas de telefonía cerca, la señal provenía desde el espacio.
Se trataba del primer SMS enviado desde el espacio a un teléfono normal y corriente y sin modificación alguna.
Ahora la empresa que ha conseguido el hito planea dar cobertura a todo el mundo.
Es el objetivo de Lynk, una startup espacial que busca convertir cualquier teléfono en uno teléfono satelital.
No es el primer SMS enviado desde el espacio y tampoco es el primer móvil que permite comunicarse directamente con un satélite, pero sí que ha sido el primero en hacerlo sin ser un teléfono específicamente diseñado para ello.
El teléfono que recibió el SMS es un teléfono Android cualquiera.
Y ahí está la esencia de Lynk, en poder ofrecer esa cobertura a cualquiera sin necesitar un costoso teléfono satelital.
Para hacer posible esto, los ingenieros de Lynk enviaron al espacio su antena especial en colaboración con la NASA y SpaceX.
El segundo se encargó de llevarla desde la Tierra hasta la ISS, mientras que los astronautas de la NASA se ocuparon de que estuviese colocada en el exterior para apuntar hacia la Tierra.
Una vez estaba todo preparado y con una empresa externa auditando la prueba para demostrar su veracidad, enviaron el primer SMS a través de esta antena de telefonía móvil colocada en la ISS.
Las velocidades que espera alcanzar Lynk con su tecnología no son las del 4G que tenemos actualmente en la superficie terrestre ni mucho menos las del 5G que se está desplegando.
En su lugar, plantean más una cobertura 2G que permita la comunicación básica para aquellas zonas del mundo donde las antenas de telefonía móvil no llegan y por lo tanto la comunicación inalámbrica es prácticamente nula.
Cuando el satélite de Lynk pasa por encima del área de la Tierra donde un teléfono quiere conectarse se establece una señal 2G con este.
De tal modo, se puede enviar bloques de información codificada que son mensajes de texto.
Indican que es una comunicación bidireccional (tanto móvil como satélite pueden enviar y recibir información) la que han estado desarrollando.
En un principio, con una pequeña red de satélites orbitando la Tierra, se podría dar cobertura 2G a todo el planeta fácilmente y sin que se tengan que adaptar los teléfonos.
Creen que es una solución ideal para situaciones de emergencia o para zonas más aisladas donde la cobertura normal de las operadoras no llega.
De momento Lynk ha enviado cuatro satélites al espacio.
El siguiente paso es avanzar en los acuerdos con operadoras de todo el mundo, lanzar más satélites y finalmente comenzar a operar.
Fuente: Xataca