Si hay algo que caracteriza a los tractores es en una carretera es su inevitable lentitud.
Y no es de extrañar, ya que los tractores se construyen pensando en la potencia y no en la velocidad.
Ahora, ¿qué pasaría si alguien quisiera fabricar un tractor realmente rápido?
Lo cierto es que hace unos años un equipo del fabricante de tractores inglés JCB se propuso hacer precisamente eso.
Aquella aventura terminó con la creación del tractor más rápido del mundo.
Un vehículo agrícola que llegó a alcanzar los 217,57 km/h y que ha logrado superar varios récord Guinness desde entonces, siendo más veloz que algunos autos deportivos.
Basta decir que tuvieron que contratar a un expiloto de carreras para que lo condujera.
En realidad, el tractor es una versión modificada del modelo Fastrac 2 de la compañía.
Y hay que tener en cuenta que incluso en su forma simplificada, pesaba cinco toneladas, por lo que el equipo tuvo que desarrollar innovar en prácticamente para mejorar la aerodinámica y lograr dicha hazaña.
Fue necesario remodelar el tractor casi por completo, empezando por equiparlo con un gran motor Dieselmax de 7,2 litros y 6 cilindros patentado por JCB que tenía 1.016 CV con tecnología híbrida y turboalimentación (con 2500 Nm de par).
Además la inyección era de agua, tenía una presión de sobrealimentación un 230% más alta y una refrigeración con agua helada.
Y, aunque el motor puede funcionar con aceite vegetal, se utilizó un diésel de carreras de alto rendimiento para conseguir batir los récords.
Y claro, se trabajó muchó en la aerodinámica.
Su cabina se redujo en 300 mm y su altura en 200mm.
También había deflectores de viento y un difusor para conseguir mejorar la penetración del aire en un 25%.
Otro punto a tener en cuenta fue reducir el peso de 8,5 a 5 toneladas.
¿Cómo lo hicieron? Principalmente se reemplazó las piezas de acero por aluminio o fibra de carbono.
Donde iba a ir metido el expiloto de motos británico Guy Martin (conocido por sus carreras en el Tourist Trophy en la Isla de Man) era otro misterio.
Se tuvo que crear una jaula antivuelco especialmente desarrollada y aprobada por la FIA.
En lugar del tanque estándar, se instalaron tanques de carreras, arneses de seis puntos y el Fastrac también tenía un paracaídas de frenado para desacelerar el vehículo.
Incluso los neumáticos se modificaron para que, en lugar de 80 km/h, se pudiera conducir a a 260 km/h sin que se rompiera la goma.
“Los mayores desafíos han incluido la aerodinámica, la reducción de peso y la mejora del rendimiento.
Conseguir que un tractor de cinco toneladas alcance de forma segura los 217 km/h y consiga detenerse no es una tarea fácil, pero todos estamos muy orgullosos no solo de haber alcanzado estos objetivos sino de haberlos superado“, explicaba Tim Burnhope, Director de Innovación y Crecimiento de JCB.
Fuente: TopGear